Llegó para hacer reaccionar al Sporting y lo ha conseguido. Rubén Baraja ha dado con la tecla que Paco Herrera reconocía no encontrar. El logro del Pipo se resume en haber sumado nueve de los doce puntos posibles desde que se sentó en el banquillo y haber recortado la distancia de cinco puntos con la promoción hasta dejarla en tres. El equipo está ahora a un partido de volver a la zona de privilegio, marcada por el Lugo, el rival que visitarán el próximo sábado con el objetivo de continuar con la escalada.

El Sporting ha retomado el pulso a la competición de la mano de Baraja. La llegada del Pipo se ha transformado en un impulso que el técnico debe canalizar para hacerlo constante. Dos son las grandes pautas en las que ha basado su propuesta para reflotar al equipo: creer fielmente en un sistema (4-4-2), e insistir en un orden táctico que incluye haber devuelto a su sitio a futbolistas como Santos. La paulatina recuperación de jugadores tras la plaga de lesiones que mermó a la plantilla y el hecho de que tres de estos últimos cuatro partidos se hayan jugado en El Molinón, curiosamente los que se han ganado, son también detalles que han ayudado al éxito del vallisoletano.

Lo más positivo del paso adelante dado por el Sporting es que el último partido, ante el Alcorcón, se convirtió en uno de los más completos de la temporada. Los rojiblancos dominaron a través de la posesión, marcando el tempo del partido con la paciencia necesaria para encontrar su momento y recuperaron la agresividad en ataque y defensa. Volvieron a ser un equipo peligroso a balón parado y mostraron una confianza que parecía perdida. Diego Mariño, salvador en tantas otras ocasiones, apenas tuvo que emplearse. La contundencia arriba y la puerta a cero es otra de las pautas de Baraja.

El Sporting visitará Lugo el sábado con la oportunidad de volver a meterse entre los seis primeros. No sólo está a tres puntos de los lucenses, también del quinto y del cuarto clasificado, Numancia y Rayo, respectivamente. No estará solo el equipo gijonés. La Mareona añadirá calor a una visita marcada por el regreso al escenario por el que pasó una de las claves del último ascenso.