La derrota en Lugo ha dejado al Sporting sin la oportunidad de volver a meterse de lleno en los puestos de promoción de ascenso a Primera División. Las consecuencias, sin embargo, han podido ser peores. Los rojiblancos ven aumentada en un punto la diferencia respecto al sexto clasificado, el puesto que marca la entrada a la zona de privilegio, ahora ocupado por el Granada, y cierran la jornada décimos. El próximo domingo espera el Nàstic en El Molinón para intentar recortar diferencias antes de la visita al Carlos Tartiere.

El Sporting se queda con las buenas sensaciones de Lugo pese a que el resultado no acompañó para romper con una racha negativa de resultados fuera de casa. El conjunto gijonés lleva sin ganar a domicilio desde su visita a la Cultural Leonesa y eso es demasiado tiempo para un equipo que pretende cerrar la campaña dentro de los elegidos para pelear por el ascenso. Con las dos primeras plazas cada vez más complicadas, el propósito de volver a colarse en promoción estuvo cerca en el Anxo Carro. Un triunfo ante los lucenses hubiera catapulutado a los gijoneses a nivel moral y clasificatorio.

La jornada en Segunda mostró a un Cádiz que detuvo su impresionante trayectoria de resultados con una derrota en su visita al Alcorcón que, en todo caso, mantiene a los gaditanos en la segunda plaza. En la pelea por entrar en la pomada de la promoción, en la que está inmerso el Sporting, no falló Osasuna. Los navarros superaron en casa a la Cultural Leonesa y son quintos, por detrás de Oviedo y Lugo. La sexta plaza está ahora en poder del Granada, que tampoco dejó escapar los tres puntos de su feudo. Los nazarís vencieron al Zaragoza. Numancia y Rayo Vallecano se repartieron los puntos en Los Pajaritos. Los madrileños se quedan séptimos, mientras que los sorianos son octavos.

El Sporting disfruta hoy de jornada de descanso y volverá mañana al trabajo, a las 17.00 horas, en Mareo. Lo hará para empezar a preparar el duelo ante el Nàstic, convertido en uno de los visitantes más en forma de la competición.