El triunfo del Rayo Vallecano fijó la hoja de ruta definitiva del Sporting. El camino hacia el ascenso irá por la vía del play-off. La plantilla rojiblanca, lejos de lamentarse por la pérdida del ascenso directo, trata de hacer virtud de la necesidad, y saca una conclusión positiva. Conocer que se va a jugar el play-off ha supuesto una liberación para el vestuario. "La opción de subir directos nos penalizó por el ansia y presión de tener que ganar", señala Rubén García, que explica que apuraron al máximo las opciones de subir por la vía directa: "Teníamos el objetivo cerca después de luchar mucho varios meses por que lo teníamos muy lejos. No ha podido ser, y también nos viene bien afrontar esta última jornada sabiendo ya que tenemos que jugar el play-off".

El mediapunta rojiblanco, que el año pasado ascendió directamente con el Levante, afronta su primera experiencia en una promoción. "Hay mucha gente en el equipo con experiencia y que ha vivido un play-off, y eso en estos momentos es clave. Son partidos de mucha tensión e intensidad, pero muy bonitos de jugar. Y para mí será muy bonito jugar mi primer play-off", señala el futbolista valenciano.

"Calendario ilógico"

El Sporting visitará el sábado al Córdoba, y en función de si queda tercero o cuarto, tendrá tres o cuatro días para preparar el primer compromiso del play-off. Una situación que no le gusta a Rubén García, que ve muy ajustado el calendario: "Es ilógico tener que jugar cuatro partidos en dos semanas en el tramo decisivo de la temporada, cuando durante el año sólo hay una jornada entre semana". Aún así, el futbolista del Sporting avisa que el equipo dará la cara: "Tenemos que adaptarnos y necesitaremos a toda la plantilla para que esté a punto, porque nos va a tocar participar a todos en algún momento del play-off".