Javier Fernández salió a dar la cara casi una hora después de truncarse el sueño del ascenso del Sporting. El presidente del club rojiblanco asumió la decepción que supone no culminar la temporada con el objetivo marcado, dio las gracias a la afición por el apoyo, y aprovechó también para respaldar a Rubén Baraja como entrenador para la próxima temporada. "Tiene contrato con el Sporting y ya ha hablado con Miguel Torrecilla de la planificación del próximo curso", señaló.

El presidente y dueño del club indicó que la derrota ante el Valladolid hace que la entidad viva "un día muy triste", y añadió que toca desde ya levantar el ánimo: "Ha quedado claro que tenemos que dar un paso adelante desde ya, quedan seis semanas para iniciar la temporada, y desde mañana empezaremos la planificaciñon, aunque es verdad que ya teníamos desde antes dos escenarios previsto, por si se estaba en Primera o Segunda. He hablado con Miguel Torrecilla, que ya solo piensa en la temporada que viene".

El Sporting se marcó el objetivo de regresar a Primera, una categoría que perdió la temporada pasada. El club contó ese curso con uno de los presupuestos más altos de la categoría, pero la planificación no fue suficiente para conseguir el ascenso, que se quedó a las puertas. "La temporada en Segunda es muy larga, ha sido una montaña rusa, nos han penalizado dos fases, la de noviembre en la que solo conseguimos dos puntos, y el final de temporada con seis derrotas en siete partidos tras haber logrado unos números de récord", reconoció el presidente rojiblanco.

En su valoración de final de temporada, Javier Fernández no puso paños calientes en reconocer que no conseguir el ascenso esta temporada supone un freno al crecimiento que tenía previsto para el club, que pese a sanear su situación económica, sigue sin encontrar una estabilidad en el plano deportivo. "No hemos rematado la temporada como queríamos. El objetivo era subir a Primera, que es donde el club merece a estar. Tuvimos unos años difíciles a nivel económico, y ahora queríamos subir para mantenernos con claridad en Primera".

El dueño del Sporting quiso también agradecer la ayuda y apoyo de la Mareona durante la temporada: "Gracias a la afición, que nos ha acompañado desde la pretemporada, ha sido una gran prueba de fidelidad que batiésemos el récord de abonados. Tenemos una deuda eterna con ellos".

Mensaje a la cantera

El día no fue bueno para la entidad rojiblanca. Primero el filial vio como se le truncaba el sueño del ascenso a Segunda División, tras caer 1-2 ante el Elche en Mareo, unas horas antes de la derrota del primer equipo ante el Valladolid en El Molinón. "El club está orgulloso del trabajo del filial, que aunque ha quedado eliminado lo que ya hecho es indescriptible", indicó Javier Fernández, que también añadió que espera que la cantera sea protagonista en el futuro de la entidad: "De esa hornada de jugadores habrá seguro varios en la plantilla del año que viene".