Los benjamines del Sporting consiguieron ayer en Badajoz su cuarto título de campeones de España de la categoría. Lo hicieron seis años después de su último triunfo, tras ganar 5-2 al Puerto Atlético de Ceuta, en un partido en el que llegaron a remontar un 2-1 en contra. Los goles del conjunto rojiblanco llegaron por medio de Yago, Iker, Víctor y Gorka (por partida doble). Antes de este triunfo el benjamín rojiblanco se impuso 9-1 al Flecha Negra en semifinales.

"Quedar campeones de España no es el objetivo, es el premio, porque el objetivo es formarles para que lleguen al primer equipo", señala Luismi Castro, técnico del benjamín del Sporting. "Me quedo con la evolución a todos los niveles de los niños. Han crecido mucho en estos dos meses. Y estamos muy contentos con el título", destaca.

La victoria en la final fue sufrida, ya que el conjunto ceutí, tras llegar 1-1 al descanso, se adelantó en la segunda mitad. Pero ahí comenzó la remontada del Sporting, que hizo valer el equilibrio en su plantilla. "Ellos apenas hicieron cambios, pero nosotros sí. Tenemos una plantilla muy completa y la supimos aprovechas", señala el técnico.

Con este título, la cantera del Sporting cierra un gran año en el que los primeros equipos de benjamines, infantiles, cadetes y juveniles quedaron campeones en sus respectivas categorías. Además, el filial llegó a la segunda eliminatoria por el ascenso a Segunda, tras ser subcampeón de su grupo, y los juveniles se quedaron con la miel en los labios tras perder en la final de la Copa de Campeones frente al Atlético.

En un año en el que se vuelve a reclamar presencia de la cantera en el primer equipo rojiblanco, los diferentes equipos de Mareo han cumplido con creces durante el curso. "Lo que más contento nos deja es el reconocimiento al trabajo de Mareo, al final, a parte del plano futbolístico, también importa inculcarles algunos valores", apunta Castro.

Con esta generación campeona, el objetivo pasa a ser ahora seguir trabajando a un gran nivel para que lleguen a la primera plantilla. "Es muy complicado, hay niños que son campeones ahora y que no llegan ni a juveniles. A veces los mejores no son los que triunfan en el fútbol. Lo importante es que sigan trabajando, los títulos ayudan, pero no soy muy importantes", destaca el técnico del benjamín del Sporting, que ayer en Badajoz consiguió hacer del conjunto rojiblanco tetracampeón de España de la categoría cuando se cumplían seis años del anterior título nacional de benjamines.