Su entrada en el terreno de juego de Santo Domingo dinamitó al equipo de Rubén Baraja. Cambió por completo al Sporting. Le dio el empuje, la garra y la movilidad que tanto a demandado el técnico durante la pasada campaña. El portugués André Sousa tiene vitola para ser uno de los líderes de este Sporting. Desde su llegada, el primer fichaje anunciado esta temporada por el club, su identificación con la entidad y la afición ha ido siempre de la mano. Sousa ha encajado a la perfección con "La Mareona", que ya le considera uno de sus ídolos y lo cual quedó plenamente ratificado con un gol que ha servido para que el equipo gijonés sumase su primer punto de la temporada. El centrocampista luso, ya tiene su propio cántico: "¡Ese portugués, que bueno es!"

"Me hablaron mucho del club y de su afición antes de venir, cuando llegué lo pude ver con mis propios ojos, es increíble el cariño que me están dando, tengo que agradecerles y quiero retribuirles con mi trabajo", aseguraba ayer el jugador. Es su moneda de cambio para devolver el afecto que ha percibido en la ciudad. Y, de momento, le ha añadido un gol a su cuenta. Su suplencia en Alcorcón fue uno de los aspectos más sorprendentes, tras ser uno de los jugadores más destacados durante toda la pretemporada. Lejos de entrar en debates, ni mucho menos, el lisboeta indicó que "no hay nadie con la seguridad de jugar, mis compañeros también son buenos jugadores y todos tienen calidad para pelear por su sitio, es bueno para la competitividad de todo el equipo".

Y su intención es la de pelear por ser uno de los elegidos para el próximo duelo en El Molinón. Sousa ha visualizado a través de vídeos el ambiente que se respira habitualmente en los partidos del Sporting como local. Restan seis días (domingo, 19 horas) para medirse al Nástic, pero el jugador ya se muestra "con muchas ganas de sentir la pasión de El Molinón".

Su debut en la Liga española fue más que positivo y, a pesar de que percibió un cambio en el estilo de juego con respecto a la Liga portuguesa considerando que "hay una intensidad muy alta", André Sousa no rehuye del periodo necesario de adaptación, pero cree que "tenemos calidad para habituarnos poco a poco".

Debutante y goleador

El portugués André Sousa entró el sábado en el selecto grupo de debutantes que han marcado en la primera jornada de Liga con el Sporting. Con su gol frente al Alcorcón en el último suspiro, lo cual supone "mi primer gol con esa emoción de marcar en el último minuto", el centrocampista (que jugó solo 23 minutos) es el quinto futbolista rojiblanco que lo logra en los últimos veinte años. Curiosamente, tres de sus antecesores -con la excepción de Víctor Rodríguez-, finalizaron el campeonato liguero como los máximos goleadores de los rojiblancos: Kike Mateo, Scepovic y Cop.

El croata fue el último en conseguirlo. Fue hace dos temporadas, cuando el Sporting se impuso en El Molinón ante el Athletic por 2-1. Curiosamente, con goles de dos debutantes, Víctor Rodríguez y el propio Cop. El reciente fichaje del Valladolid, finalizó el curso como el máximo goleador del equipo gijonés con nueve tantos en su casillero personal. Tres años antes, en la campaña 2013/14 y con José Ramón Sandoval en el banquillo, la figura fue Stefan Scepovic, que marcó en el estreno liguero frente al Real Madrid Castilla, firmando 23 dianas esa temporada.

El precedente anterior al del serbio corresponde a Kike Mateo, que data de la temporada 2007/08. El murciano fue partícipe de la goleada por 4-0 ante el Poli Ejido, finalizando como máximo goleador del equipo de Preciado con doce goles, uno más que David Barral. En su caso, sin ser un delantero centro. Una historia que ahora se repite veintiún años después con el centrocampista André Sousa como protagonista. No es su misión, pero el lisboeta se ha convertido en el artífice del primer gol de la temporada del Sporting de Baraja. Y avisa: "me gusta disparar desde fuera del área".