El Sporting continúa a la espera de que el juzgado de lo mercantil haga definitivo el cierre del concurso de acreedores después de que el club completara, en diciembre del año pasado, los últimos pagos para dar por concluido el proceso. Este último capítulo pondrá el punto final a una situación que comenzó cuando Coral Golf instó en 2005 el concurso necesario de acreedores del Sporting, que por entonces tenía una deuda estimada de 50,7 millones de euros.