El entrenamiento de ayer del Sporting en Paterna dejó una imagen poco habitual. Javier Fernández, presidente del club rojiblanco, presenció la sesión desde uno de los banquillos del campo, en una imagen que evidenció la importancia y cercanía de una cita como la de esta noche en Mestalla. Minutos más tarde se sumó Ramón de Santiago, consejero del Sporting, recién llegado a la capital del Turia. Éste se ubicó en uno de los laterales del campo. Javier Martínez, vicepresidente, completó la representación institucional ya mediada la tarde, en el hotel de concentración.

El que fue un sportinguista más en Paterna fue Rubén Suárez. El exrojiblanco saludó a la expedición gijonesa al término del entrenamiento matinal, a quienes deseó la mejor de las suertes para el partido de vuelta de los octavos de final de Copa del Rey, que tiene previsto ver en el campo. El hijo de Cundi, que sigue en activo en las filas del Club Deportivo Acero, "el equipo en el que jugó Maceda", subraya, estuvo acompañado por Joel, su hijo, que ha heredado su sportinguismo. Rubenín trabaja también para una agencia de futbolistas. Otro representante como el exfutbolista Quique Estebaranz también se acercó a Paterna para charlar, entre otros, con Cordero.

Josep Alcácer fue otro de los que tuvo la oportunidad de reencontrarse con el Sporting. El que fuera integrante del cuerpo técnico rojiblanco durante la etapa de Manolo Preciado en el banquillo reside en Valencia y se acercó para saludar. Se abrazó con especial cariño con Iván Hernández, actual segundo entrenador de los gijoneses, y Canella, capitán del equipo, con quienes coincidió durante su etapa en Gijón. El exrojiblanco se encuentra ahora a la espera de ofertas. En su última etapa ejerció de segundo entrenador junto a Fran Escribá, en Elche, Getafe y Villarreal. En la actualidad se ha desligado ya del cuerpo técnico de Escribá, que también está pendiente de encontrar destino.