En una hora idónea para la siesta, para acomodarse después de una buena comida de domingo en familia, al Sporting le entró prisa por ganar. Si en la primera parte sólo tardó 50 segundos en hacer gol, en la segunda el Sporting quiso superar la marca, y en apenas 28 hizo otro tanto. Un gol en el inicio de cada tiempo para resolver el partido ante el Alcorcón, respirar, reengancharse a la pelea por el play-off y mantener la fe. Con Djurdjevic en racha, con un tanto marcado en cada uno de los partidos que se llevan de año, y con cuatro en su cuenta ya este curso, el serbio se ha quitado el peso de estrenarse y es un puñal. No sólo marca, sino que participa más en el juego y sale ganador de la mayoría de las disputas que realiza. Si mantiene este tono, el Sporting también crecerá. Y si se suma a la fiesta Robin Lod, ayer con asistencia y gol, habrá más motivos para seguir creyendo en este nuevo Sporting liderado por José Alberto.

El Sporting fue práctico para conseguir su primer triunfo del año 2019. En un partido, que fue aburrido por momentos y que podía tener la trampa de la distracción de la Copa, el retorno a la Liga de los rojiblancos fue perfecto. Desde el 2 de septiembre no ganaban un partido cómodo en casa, con el triunfo por 2-0 ante el Nàstic de Tarragona. El Sporting supo aprovechar la debilidad del Alcorcón, que sigue en un profundo bache, con dos puntos logrados en los últimos seis partidos.

En el día en que José Alberto sentó por primera vez a Carmona, y optó de nuevo por el sistema de tres centrocampistas, el Sporting jugó a la perfección con los tiempos del partido. No entusiasmó ni hizo sangre en un encuentro que tenía muy de cara, pero sí que como nota positiva destaca el hecho de la templanza y tranquilidad para dejar ir pasando el paso de los minutos, una situación que no había sucedido en las últimas semanas en un equipo acostumbrado a los partidos de ida y vuelta.

Con respecto al once de Albacete, las únicas novedades fueron la entrada de Lod y Nacho Méndez por Carmona y André Sousa. La idea de juego fue la misma que en las últimas semanas. Y el resultado positivo. El Sporting recorta tres puntos con el play-off de ascenso. Además, recupera su idilio con El Molinón y olvida el fiasco de la tarde del día de Reyes ante el Zaragoza.