"Tengo un recuerdo imborrable de Lavandera, Puente, Montes, García-Cuervo... Era un equipo muy de Gijón. Antes había arraigo y una conexión con el equipo. La gente se identificaba con lo que había". Carlos Álvarez, uno de los socios que ayer cumplió 50 años como abonado del Sporting, hace memoria y añora sus comienzos viendo al equipo rojiblanco. La primera vez que se hizo abonado tenía 13 años. "Está difícil, pero si ganamos cuatro partidos estamos ahí otra vez, confío en que lo lograremos", indicó sobre la posibilidad de que el equipo actual del Sporting dispute el play-off.
Aquilino Tuero, por su parte, es más crítico con la situación. A sus 75 años, ha visto más de medio siglo al Sporting. "Socio soy desde los 25. Lo había sido también antes, pero me borré cuando hice la mili", apunta. "Esta temporada ya no tenemos opciones, hay que hacer la base para el año que viene, hace falta gente de Mareo, hay que tener paciencia", destaca. En su caso comenzó a ir a El Molinón con su tío Clemente. "Mis mejores recuerdos fueron del comienzo, cuando jugaban en el Sporting Sánchez, Germán, Tamayo, Medina y Molinucu", resalta.
Las opciones de que el Sporting se acerque al play-off, que ahora tiene a once puntos, generan división de opiniones. En el grupo de los optimistas se encuentra Juan Jesús García. "Quedan todavía muchos puntos en juego, y en el fútbol puede pasar de todo, hay que creer", señala. De su debut como socio recuerda que "aquel año se empezó a utilizar la luz artificial, y al siguiente celebramos el ascenso a Primera".
También cree todavía en el equipo María Jesús Morán: "Confío todavía en jugar el play-off, mientras hay puntos en juego hay que pelear por ello". Sobre sus primeros partidos en El Molinón, cuando solo tenía 20 años, indica que "recuerdo la manera de saltar que tenían Paquito y Solabarrieta pese a que eran muy bajitos".
En 1968 no era habitual que hubiese tantas mujeres como ahora en El Molinón. "Éramos muy pocas, me alegro que ahora haya muchas", señala Carmen García, socia desde los 16. "Echo en falta hoy a Quini", indica antes de señalar que no cree en el ascenso este año: "No creo en que este equipo pueda conseguir nada, me conformo con la permanencia".
Por su parte, Luis Octavio Varela también tira la toalla. "No vamos a subir, es muy difícil, no veo a la plantilla capacitada, falta gente de Mareo como la de antes", señala este avilesino, que se hizo socio con 20 años porque era vecino de Castro y Quini en Llaranes.
