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Un encuentro con huella

Dobletazo de Matabuena

El medio cántabro marcó sus dos únicos tantos con el Sporting en una visita al Córdoba en 2008, uno de ellos casi desde el centro del campo

Matabuena pelea por un balón con Javi Moreno en el duelo entre Córdoba y Sporting en enero de 2008.

En una mañana de Reyes, en Córdoba, Matabuena brindó su mejor regalo al sportinguismo. El 6 de enero de 2008 el centrocampista cántabro marcó sus dos únicos goles con el Sporting. En la larga carrera por el ascenso, puntos como el logrado en El Arcángel fueron decisivos para que el equipo entrenado por Preciado pudiese festejar finalmente el ascenso de categoría a final de temporada. El Sporting empató 2-2 ante el Córdoba, en un partido que se puso muy cuesta arriba con dos tantos de los andaluces antes del descanso, pero que fueron corregidos en apenas tres minutos, en el 79 y el 82, por un brillante Sergio Matabuena. El primero de los goles llegó de cabeza, y el segundo con un magnífico disparo casi desde el centro del campo.

El Sporting se sobrepuso a los elementos para rescatar un punto en Córdoba cuando ya parecía imposible. Porque Mateu Lahoz expulsó a Míchel en el minuto 19 de partido. Una situación que no era nueva, ya que ese mismo árbitro, ahora mediático en Primera, ya había mostrado la tarjeta roja al de Pola de Lena la temporada anterior en un partido frente al Numancia. Y esa cruz que le puso a Míchel aún tendría un capítulo más, en el duelo ante el Granada 74 de la segunda vuelta. De las siete expulsiones que recibió en Liga Míchel como jugador del Sporting, tres de ellas fueron a cargo de Mateu Lahoz.

Volviendo al partido del Arcángel, el Sporting remontó en el tramo final en inferioridad numérica. Queda para la memoria un detalle curioso, como fue la celebración de los goles. El estadio del Córdoba se encontraba en obras y el fondo en el que marcó los dos tantos Matabuena estaba libre, sin grada, y con el autobús del Sporting aparcado justo detrás. Allí, tras la portería de pie estaba viendo solo el partido el chófer del Sporting, Raúl Otero, que festejó muy efusivamente dando saltos los goles de Matabuena, que recibió el apodo de "Gattuso" por parte de la afición del Sporting, que durante sus cuatro años en Gijón tuvo el cántico personalizado y repetido de La Mareona de "Matabuena, Gattuso, alé".

Ese 6 de enero de 2008 el Sporting formó en Córdoba con Roberto; Raúl Cámara, Joni López, Jorge, Neru; Matabuena, Míchel; Pedro, Omar, Diego Castro y Barral. Antes del descanso Iván Hernández entró por Pedro, y en la segunda vuelta Bilic por Barral y Omar por Luis Morán.

"Un punto 'matabuenísimo'" fue el titular de la crónica de LA NUEVA ESPAÑA de aquel partido en El Arcángel, en la que también se destacaba que "El Sporting, con dos goles del cántabro, logra un empate que sabe a victoria tras jugar setenta minutos en inferioridad por la absurda expulsión de Míchel y remontar dos goles en contra". Asimismo en el análisis del encuentro se apuntaba el gran factor moral que supuso salvar un punto para los rojiblancos: "Los de Preciado dieron un golpe encima de la mesa, sacaron el carácter y dijeron 'aquí estoy yo' para mantenerse en ascenso cuando todo estaba en contra".

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