En su primer desplazamiento de esta temporada, los componentes de la peña Rober Canella se enfrentaron a un dilema: el Sporting o su paisano de Pola de Laviana. "No hay ninguna duda, no tenemos el corazón dividido, vamos con el Sporting", comentaron de forma tajante los peñistas en la sesión vermú en el centro de Lugo antes del encuentro. "En este partido que se relaje, pero después le deseamos lo mejor a Rober", añadieron. Entre ese grupo de aficionados se encontraban Sandra Vázquez y Marta Coya, optimistas en el desplazamiento a la región vecina pese al mal momento del equipo. "Aunque no jueguen a nada, tenemos que creer siempre", señaló la primera. "Vamos a ganar y Djuka va a volver a marcar", pronosticó la segunda. El viaje a Lugo estaba marcado en el calendario de la Mareona, que estuvo representada por más de un millar de seguidores, que se repartieron por prácticamente todas las gradas del Anxo Carro. "Solo llevamos tres goles fuera, pero aún así, somos fieles al Sporting", comentó Anselmo Hernández antes del partido. "Vine los dos últimos cursos a Lugo, espero que a la tercera vaya la vencida y celebremos un triunfo", añadió.
No tuvo que madrugar mucho ayer el sportinguismo, en un desplazamiento cómodo de menos de tres horas en coche. Libró la Mareona la niebla en Mondoñedo, con la autovía abierta al tráfico, pero aún así la gran mayoría hizo parada para desayunar en torno al puerto de montaña. A la llegada a Lugo, una carrera deportiva de atletismo, entre la lluvia, recibió a la Mareona, que se topó con un fallo eléctrico en una plaza céntrica, que hizo que los bares se quedasen sin luz. Pero eso no impidió que los ánimos se enfriasen.
Fue especial el desplazamiento de ayer a Lugo para la peña La Urgisa de Gijón, recién creada, y que debutó en un viaje. "Esperamos que el estreno sea con una victoria", enfatizó el tesorero de la misma José Llorente, que aventuró más viajes para este curso. "Ponferrada, La Coruña y Santander son destinos en los que posiblemente estaremos también". A su lado, el presidente de la peña, Marco Antonio Suárez, aprovechó la ocasión para pedir un deseo: "Pedimos a los Reyes Magos que nos traigan un delantero en enero que nos marque 15 golinos". Enfrente, en las filas del Lugo, un club amigo para el sportinguismo -por el gol de Caballero al Girona que facilitó el ascenso hace cuatro años-, se encontraban los exrojiblancos Canella y Peybernes, que fueron recibidos con cariño por la Mareona. Y como hace prácticamente un año, el último desplazamiento de diciembre de Liga fue a Lugo, y el rojiblanco de ambos clubes se mezcló en un gran ambiente. Y al final, los puntos viajaron para Gijón.
