"El Sporting es un equipo de nivel". Pepe Mel, entrenador de la Unión Deportiva Las Palmas, destacó la calidad de los rojiblancos antes de adelantar la dificultad de romper con una racha de diez jornadas sin ganar en un campo como el municipal gijonés. "Ir a El Molinón es oler a fútbol. El modelo del Sporting es gente de la casa, gente joven que corre, intensa, y un público muy metido. Está a nada de arriba, pero también tiene que tener cuidado con lo que viene de abajo, como nosotros. Va a ser difícil", subrayó.

"Mi relación con Rocco Maiorino era buena. Estaba con nosotros desde muy temprano por la mañana y todo lo hacíamos juntos. Somos gente de club y ahora está Luis Helguera. Nos hubiera gustado que esa decisión la hubiese tomado en otro momento, pero le deseamos suerte. Son cosas del fútbol", explicó Mel sobre una semana convulsa en lo institucional, en la que el club ha cambiado de director deportivo. En lo puramente deportivo, el madrileño lamentó las ausencias de Juanjo Narváez y Aridai Cabrera. "Son dos bajas importantes, sobre todo la de Juanjo, porque la de Aridai la preveíamos desde el miércoles. Lo de Narváez fue una sorpresa -molestias en la ingle- y nos hace daño porque es importante para todos", dijo, al tiempo que agregó que su equipo hará "frente a las adversidades, como siempre". "Estoy seguro de que competiremos bien", sentenció.

Mel también se refirió al último fichaje de la UD, el delantero Cristian López. "Ha jugado toda su vida de referencia. Le conozco de Francia. Nos tiene que ayudar. Es un futbolista valiente", explicó. Pese a las bajas, el preparador amarillo aplaudió el hecho de que "los jugadores se saben de memoria todos los sistemas y eso es lo importante".