"Afortunadamente, en el club no hay ningún trabajador ni nadie en cuarentena por síntomas". Antonio Maestro, jefe de los servicios médicos del Sporting, explica la situación médica que envuelve a jugadores, técnicos y empleados del club rojiblanco en relación con el COVID-19, que ha registrado varios casos en el fútbol español. Hubo una excepción, la del positivo dado por Javi González, jugador del Sporting Genuine, aunque el facultativo asegura que no hubo contagios y celebra que, "tras haber estado en el HUCA, ahora está en su domicilio siguiendo la fase de aislamiento".

"En el Sporting no hemos recibido ningún test de coronavirus", asegura Antonio Maestro, descartando que el club haya podido disponer de ellos hace dos semanas, en el inicio de la pandemia, a través de la Liga. "Creemos que hay otras prioridades o se han tomado otras decisiones basándose en las necesidades de estos", indica el facultativo gijonés. "Sea oportuno o no que se haya hecho -la opción de que la Liga brindase este tipo de pruebas que escasearon en los hospitales-, ahora hay otras prioridades en la sociedad española y no podemos banalizar situaciones como puede ser las necesidades de cada persona. La prioridad no debe ser otra más que la de la salud de los españoles", añade.

En cuanto a la vuelta a la competición, Antonio Maestro se alinea con Djukic a la hora de valorar el tiempo de recuperación que necesitan los futbolistas entre la disputa de un partido y el siguiente, fijándola en 72 horas. Esto viene por el hecho de que se plantee concentrar el calendario para que se pueda concluir la Liga y evitar darla por anulada. "Es acertado que el mínimo esté alrededor de las 72 horas para que lleguen en las mejores condiciones fisiológicas. En esta franja de tiempo hay que tomar unas medidas para que el descanso y la actividad física se solapen", sentencia el traumatólogo gijonés.

La gran incógnita es saber cuándo los equipos de fútbol podrán volver a entrenarse con normalidad y qué plazo hará falta para que puedan afrontar la competición en óptimas condiciones físicas. Antonio Maestro llama a la calma. "No podemos crear expectativas que puedan conducir a errores. Primero, habrá que superar esta situación y, cuando llegue el momento de poder estar todos agrupados, se tomarán decisiones. Sería aventurarse concretar alguna medida antes de saber cómo van a estar los futbolistas", sentencia.

El confinamiento ha servido, al menos, para vaciar la enfermería del Sporting. Maestro da casi por recuperados a los lesionados. "Marc está con un periodo de actividad pautado por el preparador físico, como si estuviese prácticamente reincorporado al grupo. Bogdan está en la fase final de la readaptación, con un trabajo más específico", señala. En todo caso, es consciente de que el encierro pasa factura a nivel físico y psicológico. "Influye. Los futbolistas no están a lo que hacen habitualmente, aunque se intenta suplir para hacer todo esto lo menos lesivo posible. Hacemos un seguimiento mediante telemedicina o a través de grupos mediante el móvil (Whatsapp). El preparador físico, el entrenador y los futbolistas nos mandan las incidencias que puedan ocurrir. A eso hay que añadir las conversaciones diarias por teléfono", detalla.

A efectos de la preparación y los consejos desde casa, el doctor insiste en que los servicios médicos "hemos basado todo en las recomendaciones trasladadas desde las autoridades sanitarias. Les hemos insistido en los hábitos higiénicos desde el minuto uno". En cuanto a rutinas, comparte la idea de ayudar desde el consejo antes que desde la imposición. "Les hemos dado hábitos. No somos partidarios de prohibir nada. Tenemos un grupo de personas que son más que profesionales en su actividad. Ellos saben lo que pueden hacer para mejorar y lo que no. Además, se ha insistido en recomendaciones desde el punto de vista nutricional, a través de Beatriz Manchón, y desde el punto de vista físico, con Fran Albert", explica el doctor.

"Hay que tomar conciencia y transmitir al resto de la sociedad que esto suponga un avance social para la mejor convivencia entre todos. El enemigo no es nuestro vecino, ni nuestra sociedad, el enemigo es el virus, y solo tenemos una manera de combatirlo: unión y trabajo", concluye Antonio Maestro mientras se mantiene la batalla contra el COVID-19.