Aunque han pasado 38 años, el Sporting de la época dorada sigue triunfando. Ayer enganchó en la pequeña pantalla durante la reposición emitida por Teledeporte de la final de Copa del Rey ante el Madrid de 1982 a un buen número de espectadores. La nostalgia se apoderó de la afición rojiblanca, bien los que la pudieron disfrutar en aquel momento en directo o por televisión, o las generaciones posteriores, que no tuvieron la suerte de disfrutar de aquel equipo, pero que ayer se emocionaron con su fútbol.

El partido, emitido por el canal público Teledeporte, contó con 120.000 espectadores de audiencia y un 0,7 por ciento de cuenta de pantalla. O es lo que es lo mismo, se duplicó el porcentaje de media del canal durante todo el día, situado en 0,4%, por lo que el Sporting duplicó la audiencia del canal.

Solo una etapa antigua del Tour de Francia, del año 1994, emitida en la sobremesa, logró tener más espectadores (146.000) que la final del Sporting de 1982, que acabó con derrota rojiblanca por 2-1 ante el Real Madrid en el José Zorrila de Valladolid.

Las redes sociales se mostraron muy intensas durante las dos horas que duró la retransmisión de un partido en el que hasta los propios comentaristas resaltaron que había más espectadores rojiblancos en la grada que madridistas. La Mareona se extendió por encima de los 15.000 seguidores, con más de 8.000 de ellos viajando desde Asturias en un día semanal. El resto eran asturianos residentes en Valladolid, otras provincias de Castilla y León, y otros que se acercaron desde la capital de España.

El Sporting, entrenado por Novoa, alineó en aquel partido a Rivero, Redondo, Maceda, Jiménez, Nicolás Pereda, Uría, Joaquín, Mesa, Andrés, Abel y Ferrero. Urrrecho y Gomes entraron en la segunda mitad por Andrés y Abel.

El Madrid se adelantó gracias a un tanto de Jiménez en propia puerta. Ferrero empató de penalti. Y los blancos pusieron el tanto definitivo con Ángel de los Santos.

El choque estuvo enmarcado por la polémica. Porque el Sporting denunció que sólo había tenido 48 horas de descanso respecto al anterior partido de Liga frente al Betis, en el que se jugaron la permanencia. Los rojiblancos acusaron ese cansancio físico en la segunda mitad. Novoa, entrenador de aquel equipo, ha recordado los hechos en LA NUEVA ESPAÑA y ha reconocido que aún le sigue molestando esa situación, y que el partido no se aplazase.