El Molinón y el Carlos Tartiere podrían quedarse sin recibir espectadores hasta 2021, o en caso de hacerlo sería con un aforo reducido, con un tercio del aforo. Sporting y Oviedo ya tienen claro que deben afrontar sin público sus partidos como locales de lo que resta de temporada, que se podría reanudar según el plan previsto la primera semana de junio. Pero además también se quedarían sin aficionados en sus estadios para el inicio de la próxima campaña.
La Liga ya ha advertido a los clubes de este escenario, tras la directriz marcada por el Gobierno, para evitar actos multitudinarios, con grandes aglomeraciones de gente que provoquen otros nuevos brotes del coronavirus.
La presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD), Irene Lozano, ha explicado esta tarde en el cantal de televisión "La Sexta" que la vuelta del público a las gradas, en caso de que se produzca, solo sería de forma reducida: "Hasta que no se descubra una vacuna, quizá podrá haber un tercio de entrada o media, según la evolución de la pandemia del coronavirus".
Esta medida se encuentra dentro del plan de reinicio de la actividad en el fútbol, pactada por la Liga, el CSD y la Federación. La primera fase será el próximo día 28 de abril con la realización de los test de detección de Covid-19 a todos los clubes de la Liga, con una previsión de que sean unos 15.000 test. "Será en condiciones seguras, aunque el riesgo cero no existe. El entrenamiento será individual o en grupos pequeños que pueda mantener la distancia social", explica la presidenta del Consejo Superior de Deportes.
El Sporting ha sido el primer club en publicar la lista con los 27 jugadores que efectuarán el test el próximo 28 de abril, y confirmar de paso que se llevarán a cabo esas pruebas.
En cuanto a la medida de jugar sin público hasta 2021, los clubes se preparan para afrontar también el impacto económico que tendría en sus presupuestos la falta de ingresos por venta de entradas y por las medidas de compensación a los abonados.
El Sporting ya se encuentra estudiando la fórmula para compensar esas devoluciones por los partidos que los abonados rojiblancos no disfrutaran en lo que resta de esta temporada.
