Pedro Díaz se centra en terminar la temporada, momento que establece para realizar balance. Tanto a nivel de equipo como en lo personal. El canterano, seguido por varios clubes extranjeros, sólo tiene referencia de "oír hablar de ello" y valora esta situación como "un plus de que estoy trabajando bien". No da por perdidas las opciones de play-off, aunque reconoce que es ya muy difícil, en buena medida, por la "falta de suerte con el gol". Espera enmendarlo mañana ante el Málaga (El Molinón, 19.30 horas), en la primera de las tres paradas que restan para echar el cierre a una campaña en la que el equipo no ha pisado la zona de play-off.

"No me gusta hacer balance de una temporada que todavía no ha acabado. Quedan tres partidos importantes", advierte Pedro Díaz antes de deslizar alguna de las conclusiones que empiezan ya a masticarse en el vestuario en vista de las prácticamente nulas posibilidades de alcanzar los puestos de promoción. "No calificaría la temporada como un fracaso. Es cierto que las cosas no han salido como queríamos, no tuvimos suerte de cara a gol, pero si no me equivoco somos el equipo menos goleado, así que defensivamente hemos estado increíblemente bien", dice el canterano, que ha perdido momentáneamente la condición de menos goleado en favor de su rival de mañana, el Málaga. 34 tantos llevan en contra los gijoneses, por los 31 de los malacitanos.

"No hubo falta de ambición en Albacete. Competimos bien. Cara a gol no tuvimos suerte, pero defensivamente estuvimos rígidos y muy bien colocados. En la primera parte pudimos hacer un par de goles más", defiende Pedro sobre la imagen ofrecida por el equipo en el Carlos Belmonte. "El punto que conseguimos no es bueno, tampoco es malo. Nosotros fuimos con la mentalidad de ir a por los tres puntos. Ahí queda", añade el rojiblanco para pasar página de lo vivido ante el Albacete, donde el equipo acabó de agotar sus últimas posibilidades de poder vivir un final de temporada luchando por colarse en el tren de la promoción.

Pedro Díaz, uno de los jugadores que más ha evolucionado deportivamente esta temporada, consolidándose en el once titular, cede protagonismo cuando se le cuestiona sobre su liderazgo en el proyecto futuro del Sporting. "Me gusta mirar a corto plazo, seguir aprendiendo de los mayores del equipo y sumar experiencias", comenta para regatear una cuestión que va de la mano a la llamada de atención que su irrupción ha provocado entre clubes holandeses, con seguimientos de PSV y Feyenoord. "No me fijo en eso. Oí hablar de ello, lo tomo como un plus y como que estoy haciendo bien el trabajo. A disfrutar los tres partidos que quedan y luego ya se verá", sentencia.

El contrato de Pedro Díaz se extiende hasta 2022 y el jugador también prefiere dejar a un lado las preguntas sobre si el club le ha planteado una ampliación de su actual vinculación. "Hasta que acabe la temporada no me gusta pensar en otras cosas", reitera antes de salir en defensa, nuevamente, de una campaña en la que debate que pueda ser considera como decepcionante. "No creo que lo sea. El objetivo queda lejos, pero aprendí muchas cosas. Maduré bastante en lo personal, y como yo lo han hecho bastantes jugadores del equipo", explica.

Unos problemas físicos han acompañado al canterano durante la vuelta tras el confinamiento, dejándole fuera de partidos como el derbi pese al interés del jugador en poder forzar para ayudar al equipo. "Trabajé y trabajo todo lo que puedo con el preparador físico para estar disponible", apunta antes de agradecer el apoyo que ha tenido de Djukic. "Su confianza me hizo dar el cambio y estar tranquilo en el campo", concluye sobre su gran campaña en lo individual.