"No doy nada por resuelto". Miroslav Djukic se niega tirar la toalla. En lo personal y en lo colectivo. El entrenador del Sporting insiste en que "no hay nada decidido, ni por arriba ni por abajo" y se remite a la filosofía de ganar el siguiente partido para ver "para qué estamos". Con la promoción prácticamente imposible y la permanencia casi resuelta, el serbio se remite a terminar "honradamente" la temporada para después hablar de un futuro que, salvo sorpresa, le sitúa fuera del banquillo.

"No está nada decidido, ni por abajo ni por arriba. Vamos a pensar en este partido e intentarlo ganar. Ya veremos para qué estamos", señala Djukic, que ni considera que la permanencia está resuelta con 51 puntos, ni tampoco que se ha perdido definitivamente la oportunidad de poder acabar entre los seis primeros clasificados. "La moral del equipo está bien porque son conscientes de que lo están dando todo y de que están haciendo bien las cosas. A veces no salen las cosas, pero estoy muy contento con el equipo, lo que están dando y cómo están jugando los partidos", argumenta para ver el vaso medio lleno.

Djukic, con pie y medio fuera del Sporting ante la compleja tarea de alcanzar el play-off, detalle que le permitiría renovar de manera automática, no entra a valorar si considera que el club le dará alguna opción de seguir en el banquillo si el equipo queda fuera del objetivo. "Sigo haciendo mi trabajo. No depende de mí. Intento hacerlo lo mejor posible y terminar honradamente la temporada. Luego decidirá otra gente", sentencia en relación a la dirección deportiva. Javier Fernández, presidente del conjunto rojiblanco, estuvo presente en el entrenamiento de ayer junto a Javi Rico, director deportivo, y Noé Calleja, secretario técnico. Una estampa, la de los tres en la grada siguiendo la sesión, que viene siendo habitual durante las últimas semanas.

"Hay mucha igualdad. Hemos visto el ejemplo del Cádiz, que tenía que ganar y no pudo, o el Huesca. La diferencia entre los que luchan por el ascenso y los que están abajo es muy pequeña. A la mínima de que sales de tu guion pierdes el partido", apunta el entrenador del Sporting tomando como ejemplo los resultados de esta jornada para justificar que al equipo le esté costando tanto sacar adelante los partidos. El serbio asume que el encuentro de esta tarde exigirá mantener la calma para conseguir los tres puntos.

"El Málaga es muy poderoso defensivamente, es difícil hacerles gol. Nos espera un partido durísimo, de no perder la paciencia. Será un partido de ajedrez donde tácticamente hay que estar bien posicionado, sin perder la compostura", detalla el técnico, que no tiene pensado variar su política de rotaciones. "No están decididos los objetivos, así que las prioridades siguen siendo las mismas", concluye respecto al equipo titular.