Cuando el miércoles el Sporting inicie en Mareo una nueva pretemporada echará a contar el reloj de la 47.ª temporada de los rojiblancos en Segunda. Superará entonces en cinco participaciones a las de Primera, la categoría que históricamente le correspondió al Sporting como su hábitat natural, pero que le ha arrebatado el peldaño inferior por las dos últimas décadas con más resbalones que alegrías. Desde 1998, con un descenso para olvidar, el Sporting ha transitado más tiempo alejado de la élite que en el lugar de privilegio: seis temporadas en Primera por 17 en Segunda -contando la que se inicia la próxima semana-.
Una situación que provoca que el Sporting, que puede presumir de ser uno de los pocos equipos que nunca ha militado más abajo de Segunda, se haya situado ahora como un clásico de la categoría, alejándose un poco más de sus años más dorados en los que era un habitual de Primera, como sucedió en las décadas de los setenta, ochenta y noventa.
De los participantes del próximo curso -a la espera de que se conozca el último club que asciende a Primera- nadie mejor que los gijoneses conoce la categoría. A sus 47 temporadas solo se le aproxima el Tenerife, que llegará a 43. Los otros dos que rondaban esos puestos cambiarán de rumbo el próximo año. El Cádiz (41 cursos) ha subido de nivel. Y el Deportivo (40) ha bajado a Segunda B. El Sporting, no obstante, tiene aún por delante al Murcia, que competirá el próximo curso en un peldaño inferior, y que ha estado 53 temporadas en la división de plata.
Con el mal trago de escaparse por tercera temporada seguida el retorno a Primera, el Sporting tendrá al menos dos alicientes para el curso en el que debutará David Gallego en el banquillo. Hay dos registros a tiro que, salvo catástrofe, los rojiblancos pasarán a liderar. Este curso los rojiblancos pasarán a ser el equipo con más puntos y goles a favor de la categoría. Para lo primero necesitan conseguir al menos 15, para superar los 1.978 del Murcia. El Sporting, con 1.963, llegará, salvo una cifra paupérrima que significaría pelear por el descenso o bajar, a ser el primer conjunto que alcanza la cifra de los 2.000.
En cuanto a los goles, con 2.452, los rojiblancos pasarán los 2.455 del Murcia y podrán llegar, si este año sus delanteros se reconcilian con el gol que tanto echó de menos primero José Alberto y después Djukic en el banquillo, a la ser los primeros que alcanzan los 2.500 tantos.
Victorias y goles para engancharse a la zona alta son dos pilares fundamentales que necesitan los rojiblancos para olvidar su tercer fiasco consecutivo en Segunda e intentar aspirar a meterse en la zona alta, tras casi dos años sin pisar ni siquiera lo puestos de play-off. El Sporting, con 671 victorias, está a 40 de las 711 del Murcia, un registro muy improbable de alcanzar este curso.
Las dos últimas décadas han provocado que el Sporting se haya convertido en un clásico de Segunda y que haya visto como su puesto natural en Primera haya quedado relegado por el momento. La temporada pasada los gijoneses alcanzaron los 1.466 partidos en Segunda, lo que supone ya ocho más que los que llevan en Primera. Al repetir en la división plata llegarán además a la cifra de los 1.500 antes -1.508 al finalizar el curso- en el segundo escalón del fútbol español. Pero aún ahí les seguirá quedando por delante el Tenerife (1.560 partidos ahora mismo) y el Murcia (1.692).
Esta semana el balón echará en rodar en Mareo de nuevo, sin que haya concluido la campaña anterior -falta por disputarse el play-off-, y para el Sporting nacerá el curso con la motivación especial de que vuelva a pesar más ser un clásico de Primera que de Segunda.
