"Soy de los que piensa que Quini está de vacaciones. Aún me cuesta creer que no está entre nosotros. El vacío que nos dejó es enorme". Lavandera fue uno de los antiguos compañeros del Brujo en el Sporting que se reunieron ayer para recordarle. Porque ayer la leyenda rojiblanca hubiera cumplido 71 años. Y en la puerta 9, un grupo de amigos y veteranos, reunidos por Sergio Puente, se juntaron para homenajearle. Un encuentro que, en otras circunstancias se hubiera celebrado en la playa de San Lorenzo en verano, pero que por la pandemia se trasladó ayer a la puerta que lleva su número.
"Siempre que paso por aquí me vienen muchos recuerdos a la cabeza. Quini era único", explicó Puente, que como el resto de asistentes lamentó el estado en el que se encuentra la puerta. "La veo triste, debería estar un poco más cuidada", comentó. "Habría que pintarla un poco, es una pena que esté así", indicó Lavandera.
Ciriaco Cano, Cundi, Redondo o Luismi fueron otros de los exjugadores que participaron en el homenaje de ayer. En el caso de Luismi lo hizo en condición de haber sido el último que le dio una asistencia de gol al Brujo. "Lo recuerdo perfectamente, fue en Zaragoza, metió la piernina y la enchufó", recordó. "Era de los que echases donde echases el balón si llegaba la marcaba. Era único", indicó antes de transmitir su experiencia entrenando y jugando con él. "Me tocó en su etapa final de jugador, pero era todo un espectáculo. Al final de los entrenamientos me decía: 'Pequeño, quédate y ponme unos balones'. Y era un espectáculo verle siempre rematar y disfrutar", apuntó Luismi.
En la puerta 9 de El Molinón ayer colocaron sus amigos un ramo simulando una especial de altar, fotos y una frase entrañable: "Señor, tú que lo hiciste todo perfecto, con Quini te pasaste".
