El escollo principal que frenó la llegada de Campuzano al Sporting desde el Espanyol el último día del pasado mercado de fichajes fue las reticencias del conjunto catalán a reforzar a un rival directo. Había empezado la Liga el Sporting con un pleno de triunfos. El Espanyol, claro favorito, también se metió en la zona alta desde el comienzo. Ninguno de los dos ha bajado de ese papel desde entonces. Gijoneses y barceloneses son los dos únicos conjuntos de Segunda que han estado siempre entre los seis primeros desde que comenzó la Liga. Y ahora, con la nueva ventana de fichajes, vuelve a aparecer en escena la tentativa del Sporting por el ariete catalán, y de nuevo la duda en el Espanyol de si favorece su llegada al Sporting o no.
El Sporting se pasó las dos anteriores temporadas sin pisar la zona de privilegio, la que da opción de pelear por subir a la máxima categoría. Después de acabar el curso 2017-2018 en play-off, tras perder con el Valladolid, solo el comienzo del siguiente curso, tras siete puntos de nueve, le permitió entrar al menos en esa zona alta al Sporting. Y desde ahí pasó inadvertido el conjunto rojiblanco por la zona intermedia hasta este curso.
Con la llegada de David Gallego se renovó la ilusión. Con solo dos fichajes, y el salto de varios canteranos, el Sporting consiguió su mejor inicio del último medio siglo, con cuatro triunfos seguidos, que le auparon al liderato, y le han permitido después encadenar una buena dinámica, en la que el Sporting se ha mantenido siempre dentro de los puestos de play-off.
Incluso los rojiblancos llegaron a firmar su mejor registro defensivo en su historia, sin encajar ningún gol en sus cuatro primeras jornadas, algo que nunca había sucedido. Con esa base, los goles de Djuka, que ya está a uno de igualar su mejor temporada, el Sporting ha mostrado una regularidad que le ha dejado en la zona alta casi en el ecuador de la competición.
Ese buen rendimiento deportivo tiene un arma de doble filo para conseguir el objetivo que se ha marcado el club, que pasaría por volver a intentar la incorporación de Campuzano para el ataque. Una llegada que se produciría para sustituir a Álvaro Vázquez, que apenas ha contado con participación este curso. El atacante ve con buenos ojos, como sucedió al inicio de curso, buscar una salida para intentar contar con más minutos que los que tiene en Gijón.
Campuzano está en una situación más compleja aún en el Espanyol, ya que ha jugado mucho menos, y además acaba contrato el próximo mes de junio. Volver a jugar con David Gallego le agrada, pero tiene la complicación de que el Espanyol duda en reforzar a un rival de la zona alta que, aunque no está metido en la pelea por el ascenso directo, sí que podría ser a largo plaza un equipo al que se podría enfrentar en el play-off. El Sporting tiene la meta en este mercado de volver a intentar su llegada, ya que el único movimiento factible que se espera es la salida de Álvaro Vázquez y la llegada de su sustituto. Las otras piezas que no son indispensables, y que tienen menos participación, tienen más difícil encontrar acomodo en el mercado.
El Sporting, con la vía del mercado de fichajes limitada y en la que apenas se esperan movimientos, se centra en la parte deportiva, donde las cosas marchan bien. Gallego situó al equipo en la cumbre desde el comienzo y ahí lo ha mantenido. La última vez que se vio una situación parecida fue con Abelardo en el curso 2014-2015, que acabó con el ascenso a Primera, y en el que los gijoneses solo se vieron en una jornada por debajo de la sexta plaza. Y fue en la cuarta jornada, tras un empate a un gol ante el Girona, y en el que el Sporting salió del play-off por tener peor “golaverage” que el Recreativo.
