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Jugadores del Sporting lamentan que “se han pasado mucho con nosotros” por la crisis del covid

Rojiblancos vinculados al brote se quejan de la dureza de las críticas | Gaspar, Mariño y Guille Rosas se contagiaron en el ámbito familiar

Isma Aizpiri, Nacho Méndez y Manu García, en el Bellavista el 24 de diciembre, en una imagen del vídeo difundido ayer por Gavia. | Grupo Gavia

Hace justo una semana, el pasado martes 29 de diciembre, los resultados PCR confirmaban la bomba que había estallado dos días antes cuando los test de antígenos, y los síntomas de algunos jugadores, advertían de un brote de covid en el Sporting.

El club notificaba los positivos de nueve futbolistas –más un auxiliar del cuerpo técnico–, sin hacer oficial la identidad de los mismos.

Algo que se ha mantenido hasta el pasado domingo, momento en el que la convocatoria de David Gallego despejó las dudas, y reflejó nueve ausencias.

Solo Gaspar Campos admitió que se había contagiado. Los otros ocho, aunque alguno de ellos en su momento transmitió al club que no tenía problemas en que se comunicase su caso, aguardan como Gaspar a la nueva tanda de test PCR que vivirán hoy en Mareo, y en las que si obtienen un resultado negativo en esa prueba y también anticuerpos en la serológica, pasarían a estar ya disponibles para Gallego.

Si no tienen anticuerpos deberán esperar a otra prueba negativa, que se realizaría el viernes.

A estos nuevos test se presentan los jugadores con ganas de poner fin a un capítulo que les ha afectado. “Se han dicho muchas cosas sin sentido, se han pasado mucho con nosotros”, cuentan.

En el vestuario rojiblanco lamentan el trato recibido por un problema de índole mundial: “Cuando se producen en otro ámbito diez positivos no se le da tantas vueltas. En una enfermedad que se contagia muy rápido y muy fácil, y que casi nadie sabe dónde lo coge. En este caso parece que todo el mundo sabe el momento, el cuándo y el por qué”.

Por el momento, los jugadores mantienen la calma, sin ninguna declaración pública, aunque sin descartar hacerlo en el futuro y “reconocer alguno de los errores” que hayan podido cometer.

Gaspar Campos fue el único que decidió hacer público su positivo para desvincularse de dos de los tres escenarios que forman parten de la investigación del Principado para determinar los orígenes del covid: reuniones de carácter social en domicilios particulares y reuniones con amigos y conocidos en ámbitos de la hostelería, según detalló ayer mismo María José Villanueva, coordinadora de programas de covid de la Consejería de Salud. “No he participado en ninguna fiesta o ámbito social que comprometiese mi salud”, reconoció el domingo a última hora Gaspar.

l otro foco de contagio es el ámbito familiar. En ese último supuesto, según las investigaciones, estarían, además de Gaspar, otros dos futbolistas cuyo ámbito fue familiar y reducido en vacaciones: Mariño y Guille Rosas.

Según fuentes consultadas por LA NUEVA ESPAÑA, el meta estuvo en Vigo, con su familia, mientras que el lateral se aisló –salvo los entrenamientos voluntarios en Mareo– para poder cenar en Nochebuena con sus abuelos.

Al dar positivo mantuvo en vilo a Guille varios días, hasta que su familia se hizo las pruebas con resultados negativos.

En el partido de ayer en Lugo faltaron otros seis jugadores: Gragera, Pedro Díaz, Pelayo Suárez, Pablo Pérez, Manu García y Nacho Méndez. A estos dos últimos se les vinculó con una fiesta el día de Nochebuena en el Bellavista, un local del Grupo Gavia del que es propietario el vicepresidente del Sporting, Javier Martínez. Ayer Gavia difundió un vídeo de ese mismo día en el que aparecen ambos futbolistas sentados en una mesa junto al exrojblanco Isma Aizpiri.

Esa grabación contrasta con otra, que circula por redes sociales de otro momento de ese día, del que se desconoce su procedencia –este es el motivo por el que un medio de comunicación no lo puede difundir, porque estaría incurriendo una ilegalidad– en el que aparecen varios jóvenes de pie y sin mascarilla. Gavia justificó que “se trataba de un momento puntual y fueron apercibidos, y algunos expulsados del recinto”.

La plantilla rojiblanca realizó la última prueba PCR –antes del regreso de vacaciones– el sábado 19 de diciembre. El domingo 20, un día antes de jugar contra el Leganés, hubo otra de antígenos. Y de ahí, hasta el domingo 27, cuando un jugador comunica sus síntomas, es el periodo en el que se habrían producido los contagios.

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