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Tras los pasos de Preciado

La última vez que el Sporting venció en el Carlos Belmonte de Albacete fue la temporada del ascenso con el entrenador cántabro

Los jugadores del Sporting, al fondo, celebran el gol de la victoria de Sastre. LNE

El Sporting tiene un aliciente más para preparar el partido de mañana frente al Albacete, en el estadio Carlos Belmonte: la superstición. La última vez que los rojiblancos se impusieron en el campo manchego fue en la temporada 2007-08, con Manolo Preciado en el banquillo, un curso que finalizó con el ascenso de los gijoneses a la Primera División. Un guión que los de David Gallego esperan poder reeditar este curso, comenzando por lograr mañana los tres puntos, sumando su segunda victoria consecutiva como visitante, tras el 0-4 de Las Gaunas.

Desde aquella victoria por 1-2, con goles de Pablo de Lucas y Sastre –para los locales marcó Alustiza–, el Sporting no ha vuelto a asaltar el Carlos Belmonte. El balance de sus últimas visitas es de cuatro empates, tres de ellos por 1-1 (2014-15, 2018-19 y 2019-20) y otro por 2-2 (2017-18). Los rojiblancos no caen en tierras albaceteñas desde la temporada 2006-2007, cuando lo hicieron por 1-0, con gol de Parri.

En suma, el balance rojiblanco en el Carlos Belmonte no puede estar más parejo. Los gijoneses ganaron seis partidos, perdieron otros tantos y empataron cinco, con lo que el duelo de mañana será el encargado de inclinar la balanza.

Campuzano, prácticamente descartado

El que está prácticamente descartado para ese encuentro es el delantero sportinguista Víctor Campuzano, que ayer volvió a entrenarse al margen de sus compañeros, por lo que parece poco probable que pueda estar disponible para David Gallego para el partido de mañana, a falta del entrenamiento que se lleve a cabo hoy. De perderse el encuentro, Campuzano sumaría tres seguidos sin participar: el de la pasada semana ante el Málaga, por lesión, el del Carlos Belmonte y el de la próxima jornada, frente al Espanyol, por la llamada “cláusula del miedo” que impide a los jugadores enfrentarse a sus equipos de procedencia.

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