La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El Sporting, fuerte entre los fuertes

El equipo gijonés ha competido bien contra los rivales que están en play-off, con una sola derrota (Espanyol), tres empates y una victoria (Almería)

Djuka controla el balón durante el Espanyol-Sporting de la primera vuelta. LOF

Para muchos analistas, el Sporting es algo así como un intruso en la fiesta de los grandes de Segunda División. Por presupuesto y plantilla, el equipo gijonés parece lejos del Mallorca, Espanyol, Almería, Leganés y Rayo Vallecano. Pero 26 partidos después, no solo les aguanta el ritmo sino que ha demostrado que puede competir con la mayoría de tú a tú. El domingo llega la reválida frente al Espanyol, el único de los cinco que le ha ganado en los enfrentamientos directos. Otros tres acabaron en empate (Mallorca, Leganés y Rayo), mientras que su única victoria llegó frente al Almería, que hasta ahora es el equipo con peores números de la Liga del play-off.

Entre el límite salarial de las plantillas del Espanyol y el Sporting hay una diferencia de casi 40 millones de euros (45,34 por 5,7), pero no se notó demasiado en el partido del RCDE Stadium de la primera vuelta. Ganó el Espanyol, pero con dos goles en los últimos minutos y cierta controversia arbitral. En aquel momento, 6 de diciembre, el equipo catalán era el claro favorito para una de las dos plazas de ascenso directo. Tres meses y nueve jornadas después, el Mallorca parece firme en el liderato, mientras que el Almería y el Leganés amenazan su privilegiada posición.

El Sporting jugó uno de sus mejores partidos de la temporada en Mallorca (19 millones de límite salarial), aunque solo le sirvió para sumar un punto (0-0). Fue, sobre todo, un primer tiempo muy completo, con la firmeza defensiva de siempre y más fluidez atacante de lo habitual. Mereció marcharse al descanso con ventaja, pero las paradas de Manolo Reina y los fallos en el remate lo impidieron. Después, cuando el equipo dirigido por Luis García mejoró, el Sporting nunca perdió la cara al encuentro y se conformó con el empate. García no dudó en calificar a los de Gallego como aspirantes a todo.

En el estadio de los Juegos del Mediterráneo ocurrió todo lo contrario que en Son Moix. El Almería (27,5 millones de límite salarial) dominó desde el principio ante un Sporting que se encomendó a su defensa y a Mariño. Pero, como ocurriría a menudo varias veces durante la temporada, en esa cuarta jornada bastó un chispazo aislado para resolver el partido y volver a Gijón con los tres puntos. Una jugada del recién incorporado Saúl García, con centro rematado por Djuka, mostró el camino a seguir y que tan bien funciona en Segunda División: fortaleza en el área propia y efectividad en la contraria, aunque por el medio no haya mucho que rascar.

Las visitas a El Molinón del Leganés (26,7 millones) y Rayo Vallecano (16,4) acabaron con el mismo resultado (1-1) y regusto amargo para el sportinguismo. Es cierto que el Leganés superó en fútbol al Sporting, pero se hubiese marchado de vacío si no hubiera mediado un claro error arbitral, al ver penalti en un salto limpio de Marc Valiente con Borja Bastón por un balón a la olla en el tiempo añadido. El Rayo también empató en los últimos minutos, pero en este caso pudo ser peor para el Sporting porque superado el 90 Ais Reig vio penalti en un despeje con la espalda de Javi Fuego, lo que conllevaba la segunda tarjeta amarilla para el poleso. El VAR sacó de su error al árbitro y, al margen de la ejecución del penalti, libró al Sporting de una alineación indebida.

Compartir el artículo

stats