Un duelo que fue algo más que de fogueo. Así fue la victoria de ayer del Sporting frente a la Ponferradina en el penúltimo amistoso del verano. Un partido en el que los de David Gallego dejaron buenas sensaciones ante un conjunto berciano que acusó la expulsión por roja directa de Yuri en el ecuador de la primera parte. En igualdad de condiciones y en superioridad, los rojiblancos mostraron más empaque con el balón y más capacidad para generar peligro. Las tuvieron de todos colores, pero al final fue Gaspar en el minuto 56 a pase de Pedro Díaz el que anotó el tanto de la victoria.
El partido fue entretenido y, por momentos, nadie habría dicho que se trataba de un duelo de preparación. La baja de Borja López precipitó el debut este verano de Babin, que llegó a primeros de esta semana tras su participación en la Copa Oro. En la zaga, Berrocal, que entró en la segunda parte, también dejó buenas maneras. El Sporting tuvo multitud de oportunidades para marcar. Incluido un mano a mano que Pablo Pérez no supo resolver, aún con el empate. Amir, el meta berciano, le sacó una gran mano a Gaspar en la primera parte, también cuando no se había estrenado el marcador. La jugada que lo decantó todo fue la expulsión de Yuri, que se fue a la ducha por reclamar un posible penalti. “El árbitro se pensó que le falté al respeto, pero hasta Babin dijo que no había sido así”, apuntó el delantero. En cuanto a la distribución de minutos, se produjo el debut con la camiseta rojiblanca de Christian Rivera, que tuvo que dejar su sitio en el ecuador del primer tiempo a Pelayo Pérez. El cantero se mostró muy seguro con el balón en los pies. También dejó un buen sabor de boca Aitor García, que fue un tormento por las bandas y gozó de alguna oportunidad para abrir la lata. Al final, el Sporting se llevó el triunfo ante una Ponferradina que acusó la expulsión de Yuri. El último amistoso será el próximo sábado contra el Lugo.
La valoración de Guille Rosas: “Pedimos jugar contra 11”
No es habitual que en un amistoso de pretemporada se de la circunstancia en el juego de que un equipo se quede con uno menos sobre el tapete. Por ello, la expulsión por roja directa de Yuri centró la valoración del duelo que hizo el sportinguista Guille Rosas, quien confesó que le pidieron al árbitro poder jugar contra once. “Pedimos que lo cambiara por otro jugador porque al final lo que nosotros queremos es coger ritmo”, explicó el lateral. “Fue una decisión del árbitro y nos tocó jugar contra diez que también sirve para probar contra equipos que estén cerrados”, valoró. Respecto a la pretemporada, que encarrila ya su quinta semana de preparación, Rosas se mostró satisfecho. “Me encuentro bien a nivel físico y las lesiones me están respetando, ahora toca empezar la quinta semana y me siento bien”, razonó el defensa. En cuanto a lo que Rosas espera del año que viene, el lateral recordó el peso de jugar en el Sporting, un club, que por historia, siempre tiene que aspirar a estar en los puestos altos en Segunda. “Lo del año pasado fue una pena, pero tenemos que seguir la misma línea y creo que lo venimos consiguiendo”, finalizó Rosas, que inicia su segundo año en el primer equipo.
