Babin afronta este curso su última temporada con contrato en el Sporting. Una campaña que, confía, no será la de su adiós al club. “Me gustaría acabar mi carrera en el Sporting”, descerrajó el central rojiblanco ayer. A sus 34 años, el central de Martinica está viviendo una segunda juventud. Sin apenas vacaciones, más allá de una semana con su familia en París en la que no dejó de trabajar, el zaguero se reincorporó a la pretemporada rojiblanca la pasada semana “con muchas ganas”. Prueba de ello es que disputó prácticamente los 90 minutos frente a la Ponferradina en el encuentro amistoso del pasado sábado.
“Estoy muy contento de reincorporarme a la dinámica, volví en forma”, explicó el central sportinguista, que participó en la Copa Oro con su selección, Martinica. Ese será, precisamente, su último torneo internacional. “La selección para mí se ha terminado, me retiro a nivel internacional, así que los veranos podré descansar”, explicó. Precisamente por eso, no duda de que “me veo en forma y creo que tengo cuerda para rato”. Una cuerda que confía en que le dure más allá de este curso. “Sé que acabo contrato, pero no es para nada una presión, ya me pasó hace tres años”, remarcó.
De las palabras de Babin se desprenden las ganas por comenzar un nuevo curso. “Afronto la temporada con la misma ilusión de siempre, ya no soy tan joven, pero sigo ilusionado, con ganas, motivado”, remarca. “Esperemos hacer una grandísima temporada”, zanja.
No obstante, huye de marcarse objetivos concretos a nivel grupal. “El objetivo ha de ser mejorar la temporada pasada en todos los aspectos”, aseguró. “Hablar de play-off sin haber empezado la Liga es adelantarse, yo solo pienso en el partido del Burgos, sacar los tres puntos y luego ya se verá”, subrayó el veterano central, que está este año dispuesto a dar un paso al frente.
“Ser capitán no es nuevo para mí”, zanja. “Esperemos que la baja de jugadores como Carmona o Javi Fuego no se haga notar mucho”, ahonda, “Mariño, Pablo Pérez, Marc Valiente o yo tenemos que dar un paso adelante y estoy dispuesto a ello”.
Así, Babin alaba la baja edad media de la plantilla rojiblanca para el próximo curso. “Es bueno tener jugadores jóvenes, no solo veteranos”, incide. “Si repetimos lo del año pasado, mezclando bien la gente joven con la gente más mayor, será un año grandísimo”, predice Babin. “Si los chavales aportan sus cosas y nosotros también, se puede hacer una grandísima temporada”, anticipa.
También gracias a la aportación de los fichajes. “Es normal que haya competencia en un club tan grande como el Sporting, nos viene bien”, asegura el veterano zaguero, que incide en que “veo bien a todos los fichajes”. También a Berrocal, que viene a aumentar la competencia en el centro de la zaga. “Estoy encantado de que haya venido a ayudarnos a cumplir los objetivos”, asegura. Lo mismo respecto a Kravets, “un lateral ofensivo y que pone muy buenos centros” o Christian Rivera, que “se crió aquí y es una garantía enorme en el centro del campo”.
Y de entre todos ellos, Babin pone el foco en un jugador: el Puma Rodríguez, que desembarcará en Gijón en los próximos días. “Se parece mucho a Jony, menos en el color de piel”, bromeó. “Ambos son zurdos, juegan a campo abierto, son rápidos, jugadores de transición, tienen desborde, regate, gol… Son parecidos”, analizó. “No quiero meterle presión, que aún no llegó, pero todos firmamos que aporte la mitad de lo que aportó Jony”. Un deseo que comparten todos los sportinguistas.
