La visita del Villarreal a El Molinón devolvió a Gijón a Unai Emery. Una visita que siempre rescata del recuerdo el vínculo de su familia con el club rojiblanco, en el que su padre, Juan, ya fallecido, militó como portero durante dos temporadas. Se inició entonces una relación de la que el propio entrenador de los amarillos después de sufrir el palo de verse eliminado, contra todo pronóstico, por el conjunto gijonés. "Son merecedores de la clasificación. Han hecho un partido muy inteligente", destacó el vasco, elegante, sobre el resultado en los dieciseisavos de final. Lo hizo antes de contar una curiosa historia que le une con el Sporting.
"Mis primeros partidos de niño en Atocha fue contra el Sporting. Yo era aficionado de la Real, pero mi padre tenía relación con Pepe Ortiz (entonces delegado del Sporting y jugador mítico de la historia del club) porque habían jugado juntos e íbamos a verle", desveló Emery. El entrenador del Villarreal explicó que su padre le enseñó entonces los valores de un club, el Sporting, por el que asegura siente "mucho respeto", deseando que esté en Primera División.