La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un buen Sporting cae de la Copa en un final loco: penaltis y Gallego hace debutar a... ¡Joel Jiménez!

El Molinón, enchufadísimo desde el inicio, acaba indignado con la actuación arbitral por dos posibles penas máximas a Djuka y Nacho Méndez

68

EN IMÁGENES: Los mejores momento del Sporting-Cádiz

Un buen Sporting dijo adiós a la Copa del Rey apurando hasta los penaltis. Los fallos de Fran Villalba y Pedro Díaz acabaron dando el pase a cuartos a un infalible Cádiz en una tanda en la que Gallego hizo debutar sorprendentemente al guardameta del filial Joel Jiménez. El desenlace no deslució la gran imagen del equipo para alegría de un Molinón enchufadísimo desde el inicio e indignado con el colegiado Ortiz Arias, al que reclamó dos penas máximas a Djuka y Nacho Méndez antes de alcanzar la prórroga. El equipo gijonés, con un colosal Christian Rivera, demostró que tiene mimbres para exigirle mucho más en Liga.

Volvió la Copa y regresó el Sporting que gusta a El Molinón. Intenso, ordenado, fiable, con confianza, valiente. No fueron los de Gallego los únicos liberados de las ataduras de la mala trayectoria liguera. También lo estuvo el público. Los espectadores del municipal gijonés estuvieron enchufados hasta en la previa. Al notable recibimiento al equipo a su llegada al campo le siguió el ambiente de siempre. El beligerante con el rival y con cada decisión del árbitro en contra. El que también juega.

Fue el Sporting metiendo poco a poco en su campo a un Cádiz respondón. Trató de aprovecharse de que los dos extremos de los gaditanos, Iván Alejo y el exrojiblanco Álvaro Jiménez, estaban muy hundidos para encontrar por dentro a Pedro Díaz. El canterano, que cumplió su partido número cien con los rojiblancos, lanzó el primer aviso con la menos buena, la zurda, obligando a David Gil a meter una gran mano abajo para mandar a córner. Y del rechace de saque de esquina, otro misil con la zurda, la de Kravets. El portero del Cádiz, ganándose el sueldo. El Molinón, aplaudiendo a rabiar a su equipo. Le siguieron dos acciones polémicas que pudieron poner por delante a los gijoneses. El Sporting reclamó, casi en la misma jugada, dos penaltis sobre Djuka y Nacho Méndez. El primero, tras pisotón Haroyan, con el que mantuvo un intensísimo duelo. El segundo, en un encontronazo de Nacho Méndez con Álvaro Jiménez. El árbitro mandó seguir. El VAR, que se estrenó en esta eliminatoria de Copa, sin mandar revisar. Si faltaba algún ingrediente para acabar de meter al público en la fría tarde-noche gijonesa, las dos acciones acabaron de volcar más las protestas sobre Ortiz Arias.

No desconectó el conjunto rojiblanco y entró en la segunda parte con mismo patrón. El ambiente era tan favorable, que hasta David Gallego se llevó el aplauso de la grada tras controlar un balón que se perdía por banda. La Copa tiene estas cosas. Mientras, el árbitro cada vez más permisivo con los visitantes y el Sporting, más indignado. La primera amarilla del partido, para un Gallego enfadado con el madrileño. El Cádiz, a por el partido: Fali, Negredo y Salvi, dentro de una tacada con media hora por delante. Le dio la vuelta al panorama. El Cádiz empezó a tener más el balón sin llegar a someter a un Sporting que veía sumar cambios ofensivos al rival. Los rojiblancos no sufrían, pero vivían ya de sacar tajada de algún contragolpe. Por el camino, la reaparición de Campuzano dos meses después. Fue en una contra como volvió a acercarse el equipo con el Puma robando y Campuzano cruzando ante el portero. La sacó Chust cuando el balón se encaminaba a ser remachado por Djuka. No fue gol, pero dio un chute de energía al equipo y al campo a cinco de los noventa reglamentarios. “A por ellos”, gritó El Molinón. El equipo, a sus órdenes. Probó antes Djuka y más tarde, Guille. También Sobrino, en el añadido, perdonó la más clara. A la prórroga.

Un solo cambio en noventa minutos para el Sporting, y dos en los ciento veinte. El segundo, tan tardío como sorprendente. Sin goles en el tiempo extra, Gallego llamó a Joel Jiménez justo antes de que el árbitro mandara ir a los penaltis. Debut para el avilesino. ¿Locura o acierto del técnico?. Todo por decidir. Los lanzamientos, sobre el fondo sur, el más caliente del campo. Mal inicio rojiblanco A Villalba se la adivinó el portero y Pedro Díaz la estrelló en el larguero. No falló ninguno el Cádiz. Álex, Negredo, Perea y Arzamendia no dieron opción a pesar de que Kravets y Campuzano marcaron. Se quedó el Sporting en octavos, pero disfrutó El Molinón y se volvió a reencontrar el equipo. La Liga espera.

Compartir el artículo

stats