La falta de gol se llevó por delante a Abelardo y bloquea ahora la puesta en marcha del Sporting de Ramírez. Ni con el método del Pitu, ni con el nuevo planteamiento del técnico canario, el camino a la portería se ilumina. Queipo ha sido el único en ver marco rival en los cuatro partidos dirigidos hasta el momento por Miguel Ángel Ramírez entre Copa y Liga. 360 minutos en los que el equipo dispuso de 133 en superioridad numérica, entre el partido del Málaga y el Leganés. Ni así pudo marcar. Tampoco encadenar demasiadas oportunidades. El gol es un reflejo de lo que empieza a convertirse en un problema profundo.
La escasez de goles se traduce en un balance de resultados tan preocupante como el de haber conseguido solo dos victorias ligueras en tres meses sumando las etapas de Abelardo y Ramírez. Problemas de antes que se repiten ahora. El entrenador canario atribuyó la ausencia de goles en Butarque a "falta de punch". Más allá de que el equipo viera condicionado el plan de partido con el tanto del Leganés nada más empezar y la expulsión de Gaku Shibasaki mediada la primera parte, la sensación es que, además de finalizar, también cuesta crear situaciones.
La búsqueda de una regularidad parece el primer desafío que quiere consolidar el nuevo entrenador del Sporting. 4 puntos de 9 posibles en Liga han servido, hasta ahora, para engordar levemente el colchón de tres puntos de distancia con el descenso que asumió a su llegada. No alcanzan, ni por cifra ni por sensaciones, para creer, de momento, en una remontada. El Sporting sigue inmerso en un proceso de reencontrarse en un juego muy diferente al buscado por Abelardo, a pesar de que el modelo con cinco defensas fue el último utilizado por el Pitu y el que ha repetido el técnico canario.
En Leganés, Miguel Ángel Ramírez reconoció que la propuesta con defensa de cinco tiene mucho de búsqueda de estabilidad: construir su idea a partir de la seguridad defensiva. "Ser sólidos atrás para crecer en otros aspectos", resumió. Lo cierto es que la Copa, con solo un día de trabajo previo al frente del Sporting, fue el único encuentro en el que los rojiblancos se vieron muy superados atrás (0-4). En Liga, de la misma forma que han marcado un solo gol, también han recibido solo uno, el de Juan Muñoz en Butarque. En busca del equilibrio, el técnico ya ha avisado que el dibujo "no es inamovible".
Con Queipo como único "hombre gol" desde el estreno de Miguel Ángel Ramírez, los cinco delanteros de la plantilla han ido teniendo sus momentos en cada uno de los cuatro encuentros dirigidos por el preparador del conjunto gijonés. Campuzano es el que ha contado con una mayor confianza, seguido de Djuka. Milo solo ha sido utilizado en Copa, mientras que Cristo se dejó ver en Butarque en una posición nueva para él, la de interior. El último en sumarse ha sido Jeraldino, que dispuso de una clara para estrenarse con gol en su debut. El bloqueo arriba es evidente y la solución sigue sin encontrarse. Lo que está claro es que el plan del Sporting de Ramírez pasa, de una u otra manera, por recuperar gol.
El club estudia recurrir las dos rojas
El Sporting decidirá hoy si recurre las rojas vistas por Jony y Guille ante el Leganés. El club volverá a examinar las imágenes del partido para valorar si presenta alegaciones o reclamaciones al respecto. Jony vio la roja directa por "protestar de forma ostensible" de camino al vestuario en el tiempo de descanso, según recogió el árbitro en el acta. En el caso de Guille, también vio la roja directa en los compases finales del encuentro al derribar a Arnaiz en "una ocasión manifiesta de gol", señala el colegiado en el acta.