Ramírez pide paciencia con el nuevo Sporting: "Si llevamos tanto tiempo sin resultados, a lo mejor no es cosa del entrenador"

El técnico rojiblanco pone a Independiente del Valle como espejo de proyecto: "Estamos cambiando cosas que marcarán la diferencia"

Miguel Ángel Ramírez, en Mareo.

Miguel Ángel Ramírez, en Mareo. / MARCOS LEON

Ángel Cabranes

Ángel Cabranes

"Los resultados que lleva teniendo el Sporting estos años no son casualidad. Nos tenemos que plantear realmente todos por qué. Como club, lo estamos planteando". Miguel Ángel Ramírez analizó en profundidad este viernes la crisis que ha llevado al Sporting a alejarse cada vez más estos años del objetivo del ascenso a Primera División. "Estamos en un proceso de cuestionarnos qué hacemos para merecer otro tipo de resultados", comentó para poner como ejemplo lo vivido en Independiente del Valle, que esta semana se proclamó campeón de la Recopa Sudamericana, cuatro años después lograr por primera vez la Copa Sudamericana con el canario en el banquillo. Y de ahí, un alegato que dejó en segundo plano la pelea de la salvación o el play-off.

"Después de varias decisiones en mi vida, vengo al Sporting porque creí que podía volver a encontrar un contexto como Independiente del Valle en cuanto a contexto de proyecto se refiere.", argumentó. El técnico dejó claro que entiende "la necesaria inmediatez de los resultados", pero insistió en que "como club hay muchos procesos, comportamientos, formas, hábitos que tienen que cambiar para poder merecer esos resultados dentro del campo. Una cosa sin la otra no va. Podemos seguir haciendo lo mismo durante años y seguiremos obteniendo los mismos resultados." ¿Cuándo se verá un Sporting más ganador? Ramírez asumió que la intención es conseguirlo "lo antes posible".

"Hemos hecho una profunda reflexión fuera del campo, con el grupo (Orlegi), con la directiva y estamos ya manos a la obra con cambios en estructura y en procesos para poder convertirnos en un club que haga las cosas de manera diferente. Hay que cambiar mucho. Entiendo que la gente no lo sepa, pero todo esto lleva un tiempo. Sé que la gente quiere que ganemos. Por supuesto. Es mi labor. Pero cuestionémonos que si llevamos tantos años sin resultados, igual no será cosa del entrenador. No hablo por mí, hablo de los compañeros que han ido pasando antes. Créanme que el club está dando pasos fuera del campo para que dentro obtengamos mejores resultados. Desde el compromiso estamos cambiando cosas que van a marcar la diferencia. No sé cuándo, pero había que cambiar", destacó.

Entre algunas de esas decisiones, citó las mejoras en el césped del campo número 2 de Mareo. "Voy a poner un ejemplo muy gráfico que puede parecer estúpido, pero creo marca diferencias. Las áreas del campo (número 2) se han cambiado después de unos cuantos años. Llegaba al punto que podían ser peligrosas para los porteros. Y no se cambiaban, y no pasaba nada. Se seguía caminando. No, es que hay que ganar el sábado. Ya, ya sé que hay que ganar el sábado, pero  hay un montón de elementos fuera del campo que tienen que empezar a cambiar", explicó. También habló de la inversión en mejorar el verde de El Molinón, en referencia a las nuevas lámparas de calor.

"El césped de El Molinón era un desastre y se está viendo una mejora importante. Igual que en Mareo. Necesitamos medios mejores. Estamos intentando mejorar Mareo para el fútbol profesional y para la base. Hemos instaurado comida diaria, desayuno y almuerzo. Eso no estaba. No digo que vayamos a ganar al Albacete porque estamos almorzando aquí, pero ayuda a tener mejores hábitos y a estar más cerca de ganar que de perder", continuó haciendo referencia al partido de este domingo, en el que los rojiblancos visitan al conjunto manchego. Un rival que marca los puestos de play-off y que, de conseguir la victoria, podría ayudar a recuperar parte de la ilusión perdida por la irregular marcha del equipo.

El entrenador del Sporting se ve al frente del proyecto la próxima temporada y recordó que "firmé año y medio. Si firmo pensando que me van a echar en un mes, no hubiera firmado. Obviamente somos el Sporting y hay que obtener resultados, pero sabiendo que hay que aprender de lo que está pasando. Si seguimos cambiando entrenadores cada dos meses, seguiremos obteniendo los mismos resultados. Si no gano me echarán igual que a todos, pero a lo mejor no es cosa de un entrenador. Hay que pararse y reformular cómo se hacían las cosas. He aprendido de Independiente del Valle. No hay trampa ni cartón, ellos lo están ganando todo. Y vienen de ser un club pequeño sin ganar nada. Si puedo aportar algo que pueda funcionar aquí, pues ya lo estoy haciendo. Así hasta el día que esté". 

Hay que aprender de lo que está pasando. Si seguimos cambiando entrenadores cada dos meses, seguiremos con los mismos resultados. Hay que pararse y reformular cómo se hacían las cosas. He aprendido de Independiente del Valle. No hay trampa ni cartón, es que lo están ganando todo. Y vienen de ser un club pequeño sin ganar nada. Si puedo aportar algo que pueda funcionar aquí, lo estoy haciendo. Hasta el día que esté. 

"No pienso en eso (play-off). Pienso en ganar y a partir de ahí, seguir mejorando como equipo. Cuanto más pensemos en el marcador, más nos vamos a alejar de ganar. Y cuanto más pensemos en qué tengo que hacer, más nos acercaremos a ello (un resultado positivo)", reivindicó el entrenador del Sporting, ante la oportunidad de sumar la primera victoria a domicilio desde su llegada a Gijón. Hay un reto añadido. El equipo, que viene de ganar al Tenerife, nunca ha enlazado dos triunfos consecutivos esta temporada. "Es mi objetivo, que seamos un equipo fiable y competitivo durante más tiempo. Para eso estamos trabajando, para ser más consistentes. Tenemos que dejar de pensar en el marcador. Tenemos que ser valientes, protagonistas y agresivos, como en casa. Si somos capaces de emular esos comportamientos, seguramente estaremos más cerca de competir mejor fuera", resumió.

Ramírez insistió en que ve a Jony comprometido para ofrecer mejor nivel y quiso dar normalidad al hecho de que Jordan haya estado dos semanas en México, además de recuperándose de una lesión, renovando su permiso de trabajo. "He entrenado en muchos países y estoy acostumbrado a todo tipo de gestiones. No me sorprende. Es absolutamente normal", comentó después de celebrar el poder disponer de toda la plantilla, salvo Nacho Martín, Nacho Méndez y Bamba. "Hay alguno con algún síntoma gripal, pero en teoría estaremos todos disponibles", apuntó. "Hay que ser especialmente agresivos y estar muy concentrados en defensa para que no puedan progresar. Tienen una pausa en el último tercio que domina al contrario. Pueblan mucho ese último tercio y si podemos evitar que el Albacete se plante ahí, tendremos mucho ganado", dijo de un rival que es el segundo equipo más realizador de la categoría.

En cuanto a lo deportivo, el canario aseguró que mantiene abierta la puerta a cambiar el dibujo táctico, como en anteriores jornadas. "La satisfacción viene dada por lo que estamos consiguiendo a nivel defensivo, ser más sólidos y conceder menos ocasiones. Lo estamos consiguiendo y nos queda trabajo. El sistema va a depender del partido que queramos. Al igual que decía que la línea de tres no sería algo eterno, pero todo va a depender del plan de partido", se limitó a explicar para no dar muchas pistas a un rival que está a una victoria de lograr los 50 puntos que dan la teórica permanencia. "La realidad del Albacete ha sido la que ha sido en los últimos. Saben que es importante alcanzar esa cifra y me parece coherente. Compiten bien y son sólidos tanto en casa como fuera. Tienen un muy buen entrenador, que quiere que su equipo sea protagonista", concluyó Ramírez.

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