Juan Cachero. Médico del Sporting, deja el cargo después de catorce años en el club rojiblanco

"El Sporting cada vez necesita más tiempo y esta goma no estira más"

"Ni en mis mejores sueños de niño me habría imaginado estar catorce temporadas, pero cuando cumples años valoras otras cosas"

Juan Cachero, en El Molinón en un partido de esta temporada. | RSG

Juan Cachero, en El Molinón en un partido de esta temporada. | RSG / A. Menéndez

Andrés Menéndez

Andrés Menéndez

Juan Cachero (Figaredo, 56 años) termina una etapa "inolvidable" de catorce años como médico del Sporting, tiempo donde ha sido uno de los profesionales mejor valorados en Mareo. Empieza ahora otra vida. Mientras seguirá en el Hospital Álvarez Buylla. "Ha sido un sueño".

–¿Por qué lo deja?

–Es una decisión meditada. Vas cumpliendo años. No tienes la capacidad de trabajo que tenías antes, ni la resolución. Dices "bueno, pues igual tengo que dejar algo". Trabajo en Urgencias. Y el tiempo te consume. Y cuando cumples años se te hace más duro no disfrutar del tiempo. Estoy algo cansado. Me hago mayor. Son 56 años. Me está pasando factura el tiempo. Fundamentalmente es eso. El tiempo.

–Catorce años...

–Nunca me habría imaginado esto. Estar cuatro años en Primera. Descender. Ascender. Emociones que para un tío de pueblo como soy yo... Me ponía las botas y me llenaba de barro hasta los tobillos. Ha sido maravilloso.

–¿Cómo lo compaginaba?

–Cuando descansas en un sitio, trabajas en el otro. Pero ni en mis mejores sueños de niño me habría imaginado estar catorce años viajando, conociendo campos de Primera, jugadores que tenía en cromos... Pero cuando vas cumpliendo años valoras otras cosas. Como andar en bicicleta. O jugar un partido de fútbol con mi hermano. Leer un libro. Cosas banales.

–¿Qué significa el Sporting?

–Más que un sentimiento (rompe a llorar). Yo tenía un padre que me llevaba a El Molinón, viajé a las dos finales de Copa... Es un sentimiento. Poder disfrutarlo ha sido un orgullo.

–¿Compatibilizarlo con su trabajo en el hospital Álvarez Buylla era un problema?

–No. Pero veo que el Sporting necesita cada vez más dedicación, más tiempo. Y no lo puedo aportar. Esta goma ya no estira más.

–¿Cuándo lo comunicó?

–Hablé con Odín hace unos quince días. Me preguntó para ir a México. Y le dije que mi idea era no continuar. No lo dije antes porque la situación del club no era la más ideal al no estar salvados. No quería perturbar nada de lo que sucediese en Éibar, que era el siguiente partido.

–¿Cómo fueron estos meses?

–Bien, yo me adapto rápido. Es una forma menos cercana. Menos familiar y más empresa, por decirlo de algún modo.

–¿Qué tal con Odín?

–Con Odín no tuve ningún problema. Si dijese lo contrario mentiría.

–¿Echa de menos a Maestro?

–Lo dije siempre: Antonio es un crack. Yo vine al Sporting con Gonzalo (Revuelta) y Antonio (Maestro). No son mis amigos, son mis hermanos. Un banco tenía tres patas y se queda con dos... ¿Cómo no le voy a echar de menos?

–¿Ha influido en su decisión?

–Si le digo que no, miento. Si le digo que sí, miento. Ni es el precipitante, ni es el causante. Influye. Pero no es el motivo real.

–¿Le dolió su salida?

–Me ha dolido la forma. Antonio podría haber salido de una forma mejor. Él representa al Sporting.

–¿Se pierde interviniendo a los jugadores fuera de casa?

–Creo que en eso hemos dado un paso atrás. Ahora el jugador se tiene que operar en Madrid, un viaje de 4 horas, volver... Aquí estás a 20 minutos. Otra cosa es que se recupere aquí.

Suscríbete para seguir leyendo