Los promotores de la estatua a Preciado se reúnen en el décimo aniversario de su creación: "Su recuerdo es eterno"

"Aquí nos vuelve a faltar alegría", dicen

Diego del Valle y Víctor Sánchez, ayer, en la estatua que recuerda a Preciado. | Juan Plaza

Diego del Valle y Víctor Sánchez, ayer, en la estatua que recuerda a Preciado. | Juan Plaza / A. Menéndez

Andrés Menéndez

Andrés Menéndez

El recuerdo de Manolo Preciado y su figura siguen muy presentes en el sportinguismo. Ayer se cumplieron diez años de la creación de la estatua al icónico entrenador. Los promotores del homenaje a la figura del histórico técnico se reunieron en el entorno de la alameda junto a LA NUEVA ESPAÑA. Ayer, de hecho, ese rincón volvió a ser uno de los más visitados y fotografiados de la ciudad.

"Preciado aglutinó a todos los sectores del sportinguismo; nos hizo a todos remar en la misma dirección", recuerda Diego del Valle. Junto a él, Víctor Sánchez, otro de los impulsores de este gran homenaje que, con el tiempo se ha confirmado como un "acierto". "Esa frase tan típica de él de ‘aquí nos falta alegría’ podría aplicar ahora", explica. "¿El recuerdo? Pensar que bien nos vendría ahora", añade Sánchez. El periodista Rubén Díaz, David Cuevas y Sergio Alonso fueron otros de los grandes responsables de que la creación viera la luz. "La figura de Preciado como persona y elemento aglutinador es inigualable. Tenía mucho carácter. Y daba sensación de unidad. Eso es muy difícil de conseguir. A nivel de carisma... Ha sido inigualable", razona del Valle. "El tema de la estatua fue controvertido en muchos sectores, pero el paso del tiempo nos ha dado la razón. Cada vez es menos discutible. El tiempo da y quita razones, y nos ha dado la razón categóricamente. Es un elemento del sportinguismo en general", añade. "Fue un entrenador diferencial en todos los aspectos, un líder", sentencia Jaime Álvarez.