El propietario de una finca agrícola de la localidad alicantina de Pilar de la Horadada encontró ayer en el interior de un embalse el cuerpo sin vida de una mujer, que según las primeras investigaciones podría llevar muerto una semana. El cadáver de la joven se encontraba maniatado y tenía una rueda metálica alrededor de la cintura, para que el peso la hundiese en el fondo de la balsa de riego. La Guardia Civil ya ha iniciado investigaciones para tratar de esclarecer este extraño suceso. El cuerpo fue hallado por el propietario de una finca situada en las proximidades.