Alicante

La Policía liberó ayer a una joven de 19 años que permaneció cuatro días secuestrada en un zulo de unos cuatro metros cuadrados excavado en la ladera de una montaña, en la provincia de Alicante. Dos hermanos con adiestramiento militar fueron detenidos como presuntos autores del rapto, que tuvo lugar el pasado lunes en la capital alicantina, cuando la joven iba a coger su vehículo. Los responsables del secuestro habrían pedido, supuestamente, un rescate de 300.000 euros al padre de la víctima, directivo de una empresa de la zona, según informaron fuentes de la Comisaría provincial de Alicante. Uno de los detenidos acababa de cumplir condena por el homicidio doloso de su mujer y el otro estuvo empleado en la misma compañía que el padre de la víctima.

La operación se inició el mismo lunes, cuando el padre de la joven secuestrada se puso en contacto con la Policía Nacional. Acababa de recibir una llamada desde el teléfono móvil de su hija en la que ella misma le comunicaba que estaba secuestrada. Acto seguido, supuestamente, uno de los secuestradores le dijo «esté usted tranquilo, no le vamos hacer nada por ahora, el miércoles le volveremos a llamar, tenga preparados 300.000 euros en billetes de 50, como llame a la Policía se estropeará todo».

A partir de ese momento se activó el protocolo de actuación establecido para secuestros. Tras las primeras pesquisas, los agentes comprobaron que el apresamiento había sido preparado meticulosamente y que la víctima había estado sometida a vigilancias previas para determinar el momento y lugar adecuados para el rapto.

Una vez que los investigadores tuvieron datos suficientes de los presuntos autores y sobre la zona en la que pudiera encontrarse la secuestrada, se estableció un complejo dispositivo para liberar a la joven que culminó con la detención de los presuntos responsables del rapto cuando se disponían a recoger el dinero del rescate en un polígono industrial.