Almería / León / Alicante / Lérida, Agencias

Una dramática jornada dejó ayer tres niños muertos en otros tantos accidentes registrados en toda España. En el suceso más trágico, un accidente de tráfico registrado en Níjar (Almería), se cobró la vida de un bebé marroquí de cuatro meses y de sus padres y dejó heridos a sus hermanos, de nueve y doce años de edad. Además, un niño de seis años falleció atropellado accidentalmente por su hermano en un garaje de León y otro de quince murió ahogado en una piscina de Alcoy (Alicante). Es la peor parte de un día particularmente complicado en cuyo balance también figuran un bebé de diez meses que se encuentra en estado crítico tras precipitarse desde un tercer piso en Lérida y una niña de once años que resultó herida tras ser atacada por un tiburón en la provincia de Tarragona.

l El accidente de Almería tuvo lugar poco antes de las diez de la mañana en el en el kilómetro 471 de la autovía A-7 a la altura de Níjar por la salida de vía del coche en el que viajaban los cinco miembros de la familia marroquí, afincada en Alicante. El vehículo, un Seat Córdoba, perdió el control y cayó por un barranco de varios metros de profundidad, lo que provocó el impacto por el que murieron el matrimonio y su bebé. Los otros dos hijos de la pareja consiguieron salvar su vida, hasta el punto en el que uno de ellos salió del vehículo en busca de ayuda y pudo recorrer un kilómetro hasta que llegó a una gasolinera.

l En León, el trágico atropello se produjo a última hora de la noche del jueves en un garaje comunitario de la calle Moisés de León. Según los primeros indicios, un niño, al parecer hermano de la víctima, se introdujo en un turismo que se encontraba en el garaje, lo desbloqueó -quitó el freno de mano- y el coche alcanzó a su hermano, que posteriormente falleció. Según algunos vecinos, el accidente pudo producirse mientras la familia descargaba las maletas del interior del vehículo tras su regreso de las vacaciones. Una llamada atendida en el Servicio de Emergencias Castilla y León solicitó asistencia pasadas las once de la noche del jueves para el menor, que había quedado tendido en el suelo, inconsciente y con una herida sangrante en la cabeza. El equipo asistencial desplazado hasta el lugar de los hechos intentó sin éxito reanimar al niño.

l Mientras tanto, en la piscina municipal de Muro de Alcoy (Alicante) falleció ayer por ahogamiento un menor de quince años, vecino de esta localidad. El accidente ocurrió en torno a las seis de la tarde en la piscina municipal, que está vigilada por socorristas. Un equipo médico del centro de salud de la población alicantina y una unidad del Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) no pudieron hacer nada por salvar la vida del menor.

l Una tragedia similar estuvo a punto de consumarse en Lérida. Un bebé de diez meses de edad se encuentra ingresado en estado crítico en el Hospital Sant Pau de Barcelona tras haber caído accidentalmente desde un tercer piso. Según informaron los Mossos d'Esquadra, los hechos sucedieron alrededor de la una de la tarde de ayer. El bebé, a pesar de su corta edad, habría conseguido subirse a un sofá ubicado cerca de una ventana del piso en el que vive con sus padres, de nacionalidad marroquí, desde donde se precipitó al vacío. Los servicios médicos desplazados hasta el lugar pudieron estabilizar al bebé, que inicialmente fue trasladado al Hospital Arnau de Vilanova de Lérida, aunque ante su grave estado de salud, ya que presentaba lesiones por todo el cuerpo, fue trasladado por la tarde al Hospital Sant Pau de Barcelona. El centro sanitario barcelonés informó ayer de que el bebé se encuentra «en estado crítico», sin dar más detalles del parte médico. La Policía Autonómica abrió una investigación sobre los hechos que ha determinando que se trató de un incidente «totalmente accidental».

l No muy lejos de allí, en la playa de Sant Salvador de El Vendrell (Tarragona), una niña de once años resultó herida tras ser atacada por un animal marino, al parecer un tiburón. El suceso se produjo alrededor de las diez de la mañana, cuando un pez de grandes dimensiones, que los testigos han identificado como un tiburón, mordió a la pequeña en un pie. La menor, que fue trasladada al servicio de urgencias del Hospital de El Vendrell, fue dada de alta después de que se le aplicaran puntos de sutura en la herida, de unos seis centímetros y «compatible» con una mordedura de tiburón.