Las primeras investigaciones realizadas por la Policía Nacional concluyen que los restos óseos hallados en el interior de una maleta escondida en unos arbustos en Menorca corresponden a un varón preadolescente, entre los 10 y los 13 años, que habría fallecido hace uno o tres años y cuyo cuerpo se descompuso dentro de esa maleta, donde también se encontraron revistas infantiles de cómic.