Oviedo,

Félix VALLINA

La Guardia Civil de Llanes -en el marco del dispositivo especial contra el tráfico de drogas puesto en marcha con motivo de la próxima celebración del Descenso Internacional del Sella- ha detenido a un vecino de Ribadesella como presunto autor de un delito de tráfico de estupefacientes. V. M. D. F., de 31 años, fue sorprendido, tras una meticulosa investigación, con diversas cantidades de hachís y cocaína, y pasará mañana a declarar por los Juzgados de Cangas de Onís.

Según fuentes policiales, «los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de un individuo que podía estar preparando la entrada de una cantidad de droga en la localidad de Ribadesella» gracias a su trabajo y a la colaboración vecinal. Los investigadores sospecharon que esta persona «pudiese estar dedicándose al tráfico de drogas», por lo que decidieron someterle a «discretas vigilancias». Las pesquisas revelaron que cuando se encontraba en zonas de ocio de Llanes, Arriondas y Cangas de Onís «era abordado por numerosos jóvenes, con los que mantenía breves entrevistas, abandonando estos el lugar acto seguido».

Indagaciones posteriores permitieron a los agentes tener conocimiento de que, ante la próxima celebración del Descenso Internacional del Sella, «el detenido pretendía aprovisionarse de sustancias ilegales para distribuir en la fiesta». El día 16 de julio, en el transcurso de las vigilancias a las que era sometido el detenido, observaron que abandonaba la localidad de Ribadesella y se dirigía hacia el centro de la provincia, «sospechando que fuera a adquirir algún tipo de sustancia», por lo que establecieron un amplio dispositivo «para evitar que la droga llegase a su destino». Los agentes interceptaron el vehículo de V. M. D. F. y procedieron a su registro. En el coche hallaron seis placas «de un color marrón verdoso que parecía ser hachís, dos bolsas con 20 gramos de un polvo blanquecino y cinco envoltorios de medio gramo de la misma sustancia, la cual el conductor reconoció como cocaína». Puestos los hechos en conocimiento de la autoridad judicial, se autorizó el registro domiciliario del detenido, donde los agentes localizaron dos placas de hachís de 100 gramos cada una, similares a las incautadas en el vehículo, y otros diez gramos y medio de cocaína. Dentro de la vivienda también se encontraron «numerosas sustancias de corte, bolsitas de plástico para la confección de papelinas, una balanza de precisión, una pistola de aire comprimido, cinco teléfonos móviles y más de mil euros en efectivo».