Los Bomberos mantuvieron ayer el dispositivo de vigilancia para evitar que se reprodujese el fuego de los incendios de los Oscos, en plena Reserva de la Biosfera Oscos-Eo, y Grandas de Salime. Bomberos y personal de empresas forestales mantuvieron dos equipos tanto en Grandas como en Nonide (Santa Eulalia). Durante la jornada de ayer se dedicaron a enfriar el suelo, dadas las altas temperaturas registradas en la zona, para evitar que el fuego se reactivase. Se calcula que entre el jueves y el viernes se quemaron unas 300 hectáreas.