El hombre que supuestamente mató ayer a Mercedes García y a su padre Gabino, tras apuñalarlos, en la playa de Laredo, es un enfermero de un hospital de Madrid que, según han señalado a Efe fuentes de la investigación, atacó primero a la mujer, a la que dio once puñaladas con un arma blanca.

Posteriormente, este hombre, que vive en Madrid por su trabajo, pero que tiene también una residencia habitual en Bilbao y otra de verano en Laredo, apuñaló con el arma blanca a Gabino García, cuando éste intentó impedir que siguiera hiriendo a su hija.

Mercedes García murió poco después de los hechos -que se iniciaron pasadas las 18.30 horas de ayer- en el Hospital de Laredo, y su padre también falleció, unas tres horas más tarde, en el Hospital de Valdecilla, de Santander.

La Guardia Civil mantiene abiertas todas las hipótesis, menos la violencia de género, sobre este doble crimen, que ha causado conmoción e incredulidad entre los vecinos de Laredo y los veraneantes, que son muchos en este época al ser ésta una localidad de turismo de verano.

La investigación policial parece descartar por ahora que se trate de un caso de violencia de género y cobra fuerza la hipótesis de la enajenación mental.

Según las fuentes consultadas por Efe, los investigadores están intentando esclarecer si el supuesto autor de los hechos -que responde a las iniciales M.I.R.- y sus víctimas se podían conocer, ya que el hombre fallecido y su mujer tienen una casa de veraneo en Laredo, próxima a la que también posee el ahora detenido.

Además, el supuesto asesino podría haber sufrido una "decepción amorosa", aunque los investigadores desconocen si tenía que ver o no con la víctima, que lleva diez años residiendo fuera de España, en concreto en Suecia.

Tampoco la Guardia Civil descarta que este crimen se haya producido por la enajenación mental del hombre, que asestó a su primera víctima once puñaladas, "otras tantas" a su padre cuando intentó defenderla y, posteriormente, se fue andando del lugar -una de las salidas de la playa de Laredo-.

En ese momento, antes de salir del arenal un ertzaina que se encontraba en la playa, fuera de servicio, logró reducir al hombre y detenerlo hasta que llegó la Policía Local, en cuyos calabozos permanece aún detenido.

El hombre declarará ante el juez este martes, 19 de agosto, o el miércoles, día 20, en el Juzgado de Instancia e Instrucción número 1 de Laredo, que es el que se hará cargo de instruir el caso, según han informado fuentes judiciales a Europa Press.

En declaraciones a Efe el alcalde de Llodio, Natxo Urkixo (Bildu), ha explicado que la corporación se mantiene a la espera de que ver qué concluye la investigación policial y hasta entonces ha pedido el "máximo respeto" y apoyo a la familia.

Ha dicho que a través de la Policía Municipal de Laredo están en comunicación con el grupo que lleva la investigación y la última noticia que han recibido es que "prácticamente descartan que sea un caso de violencia de género" pero ha pedido "mucha prudencia" a la hora de extraer conclusiones porque el presunto autor del homicidio podría estar siguiendo esta estrategia para su autodefensa.

No obstante, ha indicado que la hipótesis que más fuerza está tomando en las últimas horas es la de que el autor el homicidio no conocía a sus víctimas y que las apuñaló en un momento de enajenación mental.

Según Urkixo, al parecer, el presunto homicida fue directamente a por Mercedes García, de 42 años, y el padre, Gabino García, de 71, que "al salir en su defensa también recibió dos navajazos".

Padre e hija eran vecinos de Llodio y aunque no eran una familia popular sí que "eran conocidos", ha indicado.

El padre estaba jubilado pero había trabajado durante años en Vidrala, una empresa de Llodio dedicada a la fabricación de envases de vidrio en la que actualmente está empleado un hijo y hermano de la fallecida, que vivía en el extranjero.

El Ayuntamiento de Llodio de momento no convocará ninguna movilización a la espera de que concluya la investigación policial porque no se quiere inmiscuir en el dolor familiar. Si finalmente trasciende que es un caso de violencia de género sí que adoptará iniciativas.

La comisión de asuntos del pleno ha aprobado hoy una declaración institucional en la que traslada su apoyo a la familia y Urkixo ha recordado que la corporación está a disposición de ellos para lo que necesiten.