Tres mineros afrontan una petición de condena de cuatro años y medio de prisión acusados de un delito de desórdenes públicos y otro de atentado contra agentes de la autoridad por lanzar botellas de vidrio contra la Guardia Civil durante los conflictos en el sector de la minería de junio de 2012.

De cara a la vista oral que se celebrará mañana en el Juzgado de lo Penal número uno de Oviedo, la Fiscalía sostiene que los hechos se produjeron en la tarde del 27 de junio de 2012 durante un corte de carreteras en la autopista A-66, en Lena, cuando los acusados fueron identificados por la Guardia Civil entre el grupo de personas que lanzaron botellas de vidrio a los agentes.

Según el Ministerio Público, esta actuación puso en grave peligro la integridad física de los guardias civiles y a los vehículos que empezaron a circular una vez reanudado el tráfico.

Así, los agentes tuvieron que cortar de nuevo la circulación para evitar daños personales y refugiarse dentro del vehículo oficial ante la multitud de botellazos que recibieron y que les obligó a retroceder marcha atrás fuera del alcance de los impactos.

Las botellas fueron recogidas de un contenedor de vidrios que se encontraba frente al margen izquierdo de la vía y el vehículo de la Guardia Civil sufrió daños valorados en 1.376,28 euros.

Además de la pena de prisión, la Fiscalía pide para los procesados su inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y el pago de forma conjunta y solidaria) de una indemnización de 1.376,28 euros a la Guardia Civil más los intereses legales.