E. P. P. era un joven brillante, de sobresaliente, pero la enfermedad mental pudo más que el brillante porvenir que le aguardaba. Anteayer, martes, atacó a su propio padre con un objeto cortante. El progenitor sufrió heridas -eso sí, superficiales- en el cuello, la espalda y las manos. La investigación de la Policía judicial de la Guardia Civil de Oviedo apunta a un posible brote psicótico para explicar este ataque y los actos que luego cometería el joven. Porque después de atacar a su padre, que acudió al HUCA a curarse, el muchacho, de apenas 20 años, se dirigió a la vía del tren y se arrojó al paso del primer convoy que se cruzó en su camino y falleció prácticamente en el acto.

No era el primer incidente de este tenor que protagonizaba el joven, según los investigadores del caso. El joven estaba a tratamiento por una esquizofrenia desde la adolescencia, pero había conseguido terminar sus estudios en el instituto Doctor Fleming de Llamaquique, en Oviedo, e incluso iniciar una carrera universitaria. De hecho, según los vecinos de la familia, residente en la localidad ovetense de Moreo de Arriba, cerca de Colloto, estudiaba segundo curso de Físicas.

Ayer, en el tanatorio del Salvador, en Oviedo, fueron decenas de personas las que se acercaron para arropar a la familia del joven. Allí aguantaba al pie del cañón el padre del joven, un hombre de 53 años y de gran envergadura, que no se alejó de la sala donde se velaba a su hijo. También estaba su madre, formadora del Instituto de la Juventud.

Numerosos jóvenes amigos del muchacho fallecido y de su hermano, muchos de ellos exalumnos del instituto Fleming, trataban de explicarse lo ocurrido, algunos de ellos con signos del llanto en los ojos. Otras personas conocidas de la familia manifestaban desconocer que el joven padeciese una enfermedad tan grave. El joven falleció poco antes de las ocho menos cinco de la tarde de anteayer, martes, en un punto de la línea férrea entre Colloto y Meres, en territorio de esta parroquia sierense. El siniestro motivó que la línea férrea permaneciese cortada durante varias horas, en tanto se procedía al levantamiento del cadáver, que se produjo pasadas las diez de la noche. El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde se le practicó la correspondiente autopsia. Mientras se producía la muerte del joven, el padre se encontraba en HUCA curándose de sus heridas.

El funeral de cuerpo presente por el joven fallecido tendrá lugar a las seis de esta tarde, en la iglesia parroquial de Santa Eulalia de Colloto (Nuevo Templo). A continuación, sus restos mortales serán incinerados en el tanatorio del Salvador.