La familia del pequeño Hugo Brandonn Álvarez, el bebé de 20 meses arrastrado por el mar en la playa de Frexulfe en los temporales de febrero, ha querido manifestar su arrepentimiento por las declaraciones que denotaban un cierto malestar con los servicios de salvamento.
El padre del niño desaparecido ha asegurado aLA NUEVA ESPAÑA que se había producido "un malentendido sobre la información que está recibiendo la familia", y por ello ofreció sus disculpas "a quienes se hayan podido ver ofendidos".
En esa misma línea, la familia quiere mostrar su apoyo y gratitud a todos los que han participado en el dispositivo, recalcando su esfuerzo para encontrar los restos del pequeño de veinte meses: tanto a los efectivos de Bomberos de Asturias, como Salvamento Marítimo, la Guardia Civil, Cruz Roja y los voluntarios de Protección Civil. También han expresado su agradecimiento al Ayuntamiento de Navia y al de Coaña "por todo el apoyo que nos está dando".
El entorno más cercano del pequeño Hugo Brandonn Álvarez había trasladado una queja al considerar que no recibía toda la información y la búsqueda se estaba reduciendo e incluso cancelado, sin haber sido advertidos. Tras esas declaraciones, ahora, admite que fueron un error por lo que se disculpan.
Fuentes cercanas al operativo indicaron que "el rastreo tiene que tener un fin", y que éste no se puede prolongar sine die, máxime debido a las condiciones de la mar, con fuertes corrientes que incrementan el área de búsqueda a toda la cornisa cantábrica e incluso a la costa francesa. Por eso se está valorando la suspensión. Actualmente hay un retén de tres bomberos del SEPA en la zona que se completa con patrullas de la Guardia Civil.
