Un hostelero ovetense, Oliver Martínez Fernández, de 36 años, falleció ayer en un accidente de tráfico con su motocicleta en el concejo de Quirós, a la altura del punto kilométrico 4,5 de la carretera AS-230, en El Reigustio. Regresaba a Oviedo tras unos días de descanso que pasó visitando a familiares y amigos en León, donde residió durante su juventud.

El suceso tuvo lugar minutos antes de la una del mediodía por causas que, por el momento, se desconocen. El Centro de Coordinación de Emergencias recibió el aviso de un conductor alertando de que se había encontrado un motorista tirado en la carretera. De inmediato se movilizó al Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU), que envió un helicóptero medicalizado al lugar. Sin embargo, el médico rescatador desplazado a bordo tan solo pudo confirmar el fallecimiento del joven. La Guardia Civil de Tráfico se ha hecho cargo de la investigación.

La noticia del fallecimiento de Oliver Martínez ha caído como un mazazo en la calle Pérez de Ayala de la capital asturiana, donde hace justo un año el chico y su pareja cogieron el traspaso del bar El Encuentro, ubicado en esta dirección. "Estaba muy ilusionado con el negocio, era un chico muy entusiasta y siempre con una sonrisa en el rostro", explicaba ayer una de sus clientas.

"No me lo acabo de creer. Siempre estaba haciendo bromas, era un chico muy atento, especial", corroboró una comerciante de la misma calle. "Es un tópico hablar bien de las personas cuando se mueren, pero en este caso es verdad, era una pasada de chaval", insistió otra vecina, muy afectada por el suceso. La noticia también corrió como la pólvora entre los hosteleros de la zona, que se echaban las manos a la cabeza por la mala suerte que había corrido Oliver Martínez.