"Soy una madre que sufre por sus hijos, nunca la secuestré". Isabel Hernández, la madre que se enfrenta a 2 años de cárcel por sacar sin autorización a su hija de un centro de menores, defendió su inocencia en la vista oral celebrada esta mañana en el Juzgado de lo Penal número 2 para esclarecer los hechos. En la vista, que proseguirá este viernes al no comparecer una testigo, también relató su versión de los hechos la abuela de la menor, que ahora tiene 13 años, para quien la Fiscalía del Principado pide también dos años de prisión.

"Me llamaron por teléfono para decirme que la cría estaba llorando, que tenía ansiedad y no era lugar para ella. Era miércoles y yo todos los miércoles iba a verla. Me dijeron que fuese a buscarla y yo fui porque soy su madre", aseguró la progenitora, quien insistió en que desconocía que estuviese haciendo algo contrario a la ley. "Yo les pregunté por teléfono si tendría algún problema por llevármela y me dijeron que no", añadió Hernández.

Los hechos se remontan al año pasado y la Fiscalía del Principado aporta una versión diferente de los hechos. El escrito de calificación provisional especifica que el 8 de enero de 2015 la Consejería de Bienestar Social y Vivienda del Principado dictó una resolución en la que indicaba el desamparo en el que vivían dos hermanas de corta edad. En la misma resolución se acordaba la asunción de la tutela de ambas niñas a favor del Principado, suspendiendo a los padres en el ejercicio de la patria potestad y dictaminando el acogimiento de ambas en un centro de protección.

El escrito de la Fiscalía continúa indicando que el 6 de febrero una de las menores fue traslada a un centro de protección de Oviedo. Días después, el 24 del mismo mes de febrero, se presentaron en el centro las dos mujeres ahora acusadas "con la intención de llevarse a la niña". Indica el Ministerio Público que ambas eran conocedoras de la resolución de la Consejería de Bienestar Social y Vivienda y de su alcance. La educadora responsable del centro se opuso a que las mujeres se llevaran a la menor, advirtiéndoles de las consecuencias que podían derivarse si lo hacían. Aun así, la madre y la abuela de la niña se llevaron a la pequeña, pese "a la expresa oposición de la educadora".

El centro interpuso entonces la correspondiente denuncia, y la Policía inició la búsqueda de la pequeña, a la que localizaron el 3 de marzo en compañía de su padre. La niña volvió de nuevo al centro del que se la habían llevado, aunque en la actualidad reside con su padre, según concretó la abogada que defiende los intereses de las dos mujeres, Cristina Braña.

Así las cosas, la Fiscalía califica los hechos de un delito de sustracción de menores, por lo que solicita una condena de dos años de prisión para la abuela y otros dos para la madre de la niña, para la que también pide la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de la patria potestad durante cuatro años.