Los primeros exámenes a los que fue sometido el teléfono móvil de Diana Quer tras su hallazgo en el puerto de Taragoña no han revelado huellas ni restos de ADN en su exterior. Según fuentes próximas a la investigación, el dispositivo se encuentra muy oxidado a causa del salitre del agua, por lo que en los próximos días será sometido a un proceso de desalinización para más tarde tratar de recuperar el contenido de su tarjeta SIM. En este sentido, los agentes especializados en la desaparición de la joven de Pozuelo confían en poder salvar al menos los datos que podría contener la tarjeta. Mientras, la familia espera que el móvil, hallado por un mariscador a unos 30 metros de distancia del muelle, arroje datos claves para la investigación. La madre de la joven sigue insistiendo en que su hija está viva.