El Gobierno indio condenó ayer las agresiones sexuales que se produjeron presuntamente contra mujeres el pasado Fin de Año en Bangalore, unos abusos que han indignado al país asiático y por los que aún no hay detenidos. El viceministro del Interior indio, Kiren Rijiju, lamentó ayer el "vergonzoso acoso" que tuvo lugar contra varias mujeres durante la celebración de Fin de Año en una popular y concurrida avenida de Bangalore. Las supuestas agresiones sexuales fueron denunciadas a través de unas fotografías publicadas por medios locales en las que se aprecia a distintas mujeres rodeadas por una turba o protegidas por miembros de las fuerzas de seguridad. Tras la difusión de las imágenes, el ministro del Interior del Estado de Karnataka, cuya capital es Bangalore, apuntó que las mujeres fueron agredidas debido "a su estilo de vestir occidental" y aseguró que el acoso es habitual "durante este tipo de eventos". Las declaraciones del dirigente generaron un contundente rechazo en las redes sociales y por parte de activistas por los derechos de la mujer. El Gobierno indio condenó las comentarios "irresponsables" del mandatario de Karnataka y pidió a las fuerzas de seguridad que detengan y "pongan entre rejas" a los acosadores.