La Policía argentina busca a un carnicero de nacionalidad paraguaya, Pedro Ramón Fernández Torres, como la tercera persona que pudo participar en el asesinato del empresario de origen lenense Roberto Fernández Montes, que fue hallado carbonizado y descuartizado en un descampado de las afueras de Buenos Aires el pasado domingo. Fernández Torres sería la persona que aparece junto a Santiago Corona, el yerno del empresario asesinado, en el vídeo que precipitó las primeras detenciones del caso.

Por optro lado, las hijas de Roberto Fernández, Giselle (32) y Natalia (34) han pedido protección policial. "Tenemos miedo de que vengan a por nosotras", indicó esta mañana Giselle, que acudió a los juzgados bonaerenses junto a su letrado, Matías Morla, conocido en Argentina como el abogado de los famosos. Las hijas de Fernández están asustadas por el entorno en el que se estaba moviendo Santiago Corona y temen que terceras personas puedan hacerles daño. Natalia, la esposa de Corona, tiene dos hijas con él, de uno y dos años edad.

Fue Giselle, que residía en el mismo apartamento de Caballito que su padre, la que dio la voz de alarma al ver las grabaciones de las cámaras del garaje de la vivienda. Al ver a su cuñado llamó a su hermana para decirle: "Estás comiendo con el asesino". Entre las dos urdieron una trampa para llevar al hombre a la comisaría. Natalia simuló que tenía que hacer unas gestiones con la Policía y que era mejor que él la acompañase. El hombre lo hizo a regañadientes, ya que quería quedarse en casa con las niñas. Finalmente fue detenido nada más entrar en la comisaría con una de sus hijas.