Un avilesino, J. A. Ll. Q., se sienta el mes que viene en el banquillo de la sección segunda de la Audiencia Provincial de Oviedo como presunto autor del apuñalamiento del novio de su suegra, unos hechos que ocurrieron el 3 de octubre de 2014 en la calle Fernández Morán del barrio del Quirinal de Avilés. En los hechos también participó el hijo menor de edad de la mujer, cuñado del encausado, que ya fue condenado por el Juzgado de Menores por un delito de homicidio en grado de tentativa a la pena de dos años de internamiento y el pago de una indemnización de 4.500 euros a la víctima en abril de 2015, tras admitir que había apuñalado al hombre.

El adolescente reconoció que aquel 3 de octubre, hacia las diez de la noche, se encontraba en la calle Fernando Morán del barrio del Quirinal y, tras iniciar una discusión con la pareja sentimental de su madre, con quien no mantenía una buena relación, se abalanzó sobre él y le clavó un cuchillo en el pecho. La sentencia recoge que "la herida hubiera podido provocar la muerte de la víctima, aunque la intervención médica evitó este desenlace". El herido ingresó en el Hospital Universitario Central de Asturias, en el que fue asistido de sus lesiones, entre las que se contaban también puñaladas en las nalgas. El joven, que tenía 17 años cuando se produjeron los hechos, ingresó en el centro de Sograndio dos días después de la agresión, tras entregarse a la Policía.

Hasta 9 años de cárcel

El ministerio público solicita para el cuñado una condena de ocho años de prisión, que la acusación particular, ejercida por la víctima, cuya identidad se corresponde con las iniciales M. A. F. P., eleva a nueve años de cárcel, como inductor de un delito de homicidio en grado de tentativa, y alternativamente ocho años por un delito de lesiones.

El yerno, defendido por la letrada María Jesús Suárez, admitió ante la Policía que estuvo presente en el altercado, pero negó haber participado en la agresión. No obstante, la víctima sostiene que el este joven participó activamente en la agresión, motivo por el que se sienta en el banquillo.