La Policía Nacional y la Guardia Civil han desarticulado una organización criminal dedicada al robo en cajeros de entidades bancarias mediante la explosión con gases. Los integrantes de este grupo empleaban disfraces para evitar ser identificados y material explosivo e inflamable para acceder al dinero que se encontraba en el interior de los cajeros automáticos. En la llamada "operación Missouri" han sido detenidas seis personas. Los arrestados, que actuaban en Andalucía, utilizaban herramientas especializadas para abrir y desbloquear los cierres de seguridad.