"Me puse a gritar y a llamar a la enfermera. Fue un susto muy grande". Así relata a LA NUEVA ESPAÑA la médica de guardia del centro de salud de Lugones (Siero) el desagradable episodio que le tocó vivir en torno a la medianoche del jueves cuando un joven de 18 años entró en el edificio y la amenazó con un cuchillo.

Afortunadamente, fue un susto con final feliz. La Policía detuvo al poco al atacante. Éste había accedido al centro de salud supuestamente para robar, forzó varias taquillas, consiguió llaves y cuando se encontró a la médico de guardia en un despacho la amenazó con el cuchillo. Antes de abandonar el lugar se apropió del teléfono móvil de la sanitaria.

La doctora, que sobre las 11 de la noche se encontraba viendo la televisión y mirando su tableta electrónica, ayer todavía no se le había quitado el susto del cuerpo. En su relato explicó que el individuo entró rompiendo el marco y la puerta de una patada. Era joven y llevaba un cuchillo en la mano. El asaltante cogió el teléfono móvil de la doctora y salió corriendo. De hecho, la policía pudo dar con él gracias al localizador del teléfono. "Fue un susto grande", insiste la mujer. "Entró por la rampa del sótano, estuvo por las consultas y como la primera planta estaba cerrada, accedió desde la segunda y cogió las llaves".

El personal de limpieza del centro había detectado en las últimas horas del día que una persona estaba merodeando por el exterior de las instalaciones y parecía buscar una entrada. En su intento por acceder al centro llegó a romper con una piedra una puerta de cristal. Cuando la Policía se desplazó hasta la zona la noche del jueves, el hombre se había ido.

Tras el asalto y el aviso a los agentes, estos lograron detener al ladrón unas dos horas después. El joven fue localizado oculto en una zona verde en las proximidades de la avenida de Viella. Fue detenido por presuntos delitos de robo con intimidación y robo con fuerza. En su poder se intervino el móvil de la doctora y fue puesto a disposición del juzgado de guardia en Siero.

Lo ocurrido no ha hecho más que agravar el malestar del personal sanitario del centro de Lugones, que advierte de que mientras no haya un guardia de seguridad, a las 10 de la noche abandonarán las instalaciones por miedo a sufrir un incidente similar. Desde ayer tienen personal de seguridad, pero parece que sólo durará este fin de semana.

El personal del Servicio de Atención Continuada del Principado viene denunciando de forma habitual el robo en estos centros, pero nunca se había alcanzado la gravedad de la noche del jueves. CC OO denuncia la falta de seguridad en los centros donde presta servicio el personal del SAC, ya que no existe personal de seguridad suficiente, "algo que desde esta federación se viene denunciando desde hace tiempo". El personal de los puntos de atención continuada del área, está en riesgo permanente, advierten desde CC OO, y el Servicio de Prevención del área debe de establecer medidas correctoras y vigilar que el SESPA las cumpla, reclaman. Asimismo advierten que se hace necesario informar a los trabajadores de los protocolos a seguir. "La seguridad de los trabajadores es una cuestión imprescindible y más en una empresa pública", sostiene el sindicato. Personal del SAC se manifestó el pasado jueves ante la Junta para pedir una mejora de sus condiciones.